¡Old Resian campeón del Litoral! La popular frase “el rugby da revancha”, se aplica cien por ciento para el Tricolor. Después de pasar ocho años en el ascenso, de tener muchos problemas como institución y de perder la final en 2016, el club nunca bajo los brazos. Tras tocar fondo en 2012 y estar cerca de la gloria en 2016, el 21 de julio de 2019 quedará en la historia del club de Mendoza y Wilde como la fecha de ingreso en ese selecto grupo de los campeones del Regional.
La emoción de muchos que peinan canas, los que bancaron la parada en tiempos difíciles o los mismos que en 2012 iniciaron la reconstrucción del club. La llegada de Rubén “Ratón” Serri quien apuntaló con muchos conocimientos el proyecto del renacimiento del Tricolor desde sus cimientos, fue fundamental porque primero había que trabajar abajo en infantiles y juveniles, organizar la institución y después pensar en la primera.
Así fue la reconstrucción, mucho trabajo, mucho tiempo invertido, el esfuerzo de todos y el día a día para crecer como institución.
El camino no fue fácil, pero cuando las cosas están claras, cuando cada actor cumple con su papel, el esfuerzo, sacrificio y mucho trabajo paga dividendos muy altos. En 2012 Old Resian jugó la promoción en el Nivel 3 del Litoral, en 2013 logró el ascenso a Primera y el debut en la máxima categoría fue ante Duendes el multicampeón del Regional. Un triunfo histórico que hasta hoy es recordado.
Tanto en 2014 como en 2015, Old Resian se metió en zona campeonato, cumpliendo el objetivo que se había planteado. Estar entre los mejores del certamen y seguir creciendo. En 2016, regresó al club uno de sus hijos pródigos, Juan Manuel Queirolo, después de quince años en Europa, “Quichi” se hizo cargo del plantel superior, dándole esa cuota que le faltaba al Tricolor para poder subir un escalón.
Esa temporada fue un quiebre para Old Resian, además de ganarle por primera vez a Jockey llegó a semifinales también por primera vez. En una definición épica ante Crai, rival al que desde el regreso a primera no había superado, con un try de toda la cancha con tiempo cumplido se hizo acreedor al derecho de poder jugar la final del Litoral. En la definición fue caída ante Duendes, en la que es recordada como la mejor final de la historia del Regional.
Quizás la inmadurez del equipo para afrontar una instancia de esas características, privaron de ese primer grito de gloria.
Pero en Mendoza y Wilde capitalizaron ese subcampeonato, la tarea todavía no estaba completa, había que seguir trabajando. Acá es cuando entra en escena la frase “el rugby da revancha”. Tres años después Old Resian llegó a la final y muchos de los que estuvieron en ese traspié en Las Delicias tenían muy en claro como había que jugar ante Jockey, un rival muy complicado para el Tricolor.
La gloria estaba muy cerca y Old Resian no la dejó escapar. Es cierto, sin jugar el rugby de 2016, jugando con el corazón en la mano, con los recuerdos de los ocho años en el ascenso, con todo el club apoyando incondicionalmente, llegaron todos esos tackles, todos esos empujes para poder gritar: ¡campeones!
El día de gloria ya tiene nombre y el Grantfield fue el testigo principal –del hasta ahora- capítulo más importante de la historia de Old Resian, un gigante dormido que este domingo de despertó para dar la vuelta.
Más disputa que juego
No fue la final que muchos imaginaban, las defensas fueron las vedetes de la definición del Litoral. Todos los puntos se registraron en el primer tiempo, Nazareno Valentini (Old Resian) aprovechó la indisciplina de Jockey para poder sumar y para acentuar el dominio Tricolor llegó el try de Ramiro Cárcamo (figura).
En los minutos finales del primer tiempo, el Verdiblanco descontó con dos penales de Ignacio Dogliani (13-6). En el segundo tiempo, hubo llegadas para ambos equipos, pero ninguno pudo marcar. El tiempo corría, el local jugó el score a su favor, la visita buscó y tuvo varios oportunidades que no pudo concretar. El epílogo tuvo muchas imprecisiones que sellaron el triunfo local.