Por Luis Chervo
En las últimas horas la ONU expresó a través de su Secretario General, Antonio Guterres, “el cambio climático está aquí. Es aterrador. Y esto es sólo el principio. La Era del Calentamiento Global ha terminado, ahora es el momento de la era de la Ebullición Global”.
El análisis brindado por la autoridad internacional, cuenta con nuevas definiciones, se generó tras el palmario cambio de temperaturas en distintas regiones del orbe. Variaciones climáticas, que a nuestra región han castigado a la Pampa Húmeda con una sequía profunda, cambiando un suelo sustentable y productivo a otro tipo de extensión geográfica que es irreconciliable con la producción agrícola y ganadera en forma permanente.
Las quemas que se realizan desde hace 200 años para nuevos pastos en las islas, eran manejables cuando existían riachos y lagunas internas entre islas que paraban esas lenguas de fuego. Como ese escenario ya no existe, una quema auto controlada, se convierte en el infierno del Dante.
Otro infierno que volverá, seguramente, con otro nombre es el Covid. En la Divina Comedia, el genial Dante Alighieri, expresa que el infierno es un enorme valle cónico que está dividido en nueve niveles o círculos, cada cual más profundo y estrecho que el anterior. En su relato cuenta que para llegar a él hay que cruzar el río Aqueronte, y las almas lo hacen en la barca de Caronte.
Ahora nos encontramos en un invierno, con veranitos en el medio, donde además hay cambios bravos en el mismo día. Dios dirá con que más nos encontraremos, entre nuestras miserias y virtudes humanas.
Hablo de estos temas, pues salimos de las internas de los espacios políticos, y pocas veces vi críticas tan lamentables dentro de un mismo espacio, en el cual sus pares despedazaron a los de sus mismos partidos en forma despiadada.
El día después encontramos que los críticos más despiadados de la gestión de Omar Perotti, son los que perdieron y además le hicieron perder espacios a su mismo partido. Que precandidatos a diputados provinciales ni siquiera clasificaron por los mínimos números que pide la interna (Paso), hablan sin mínimos pudores, he incluso los pitucos de Recoleta, premian a eternos perdedores en puestos relevantes, para elecciones que serán históricas en un mes de agosto adoctrinador, seguramente.
En este mundo en Ebullición, escuchamos al propio Maximiliano Pullaro decir que salva tres puntos al menos de la gestión del rafaelino: el Boleto Estudiantil, la Billetera Santa Fe y el Plan Maestro de Caminos Rurales.
Y seguramente a medida que uno se aleje del cuadro, es decir, a partir de que pase esta gestión y nos alejemos como sucede cuando uno mira un cuadro, recuperarán el valor y dimensión económica, productiva y social, los 700 km de caminos nuevos, los planes de asistencia en los barrios más pobres de la provincia, a pesar de que ahora se los anoten los intendentes y los presidentes comunales. En ese tiempo de balances posteriores, serán los gasoductos, los acueductos, las inversiones en energía, las que serán debidamente merituados los pagos al día, tanto con proveedores como los empleados públicos.
Pero creo que lo que dejará Perotti con mayor valor a futuro son elementos para pelear en este nuevo mundo de la Era de la Ebullición. Desde la conectividad, hasta el impulso increíble de sinergia entre lo público y privado, donde se han logrado desarrollar ideas en hechos, en áreas de tecnología y desarrollo genético, y finalmente lo que le abrirá a Santa Fe los nuevos y más competitivos mercados a través del Sello Verde.
Precisamente el Sello Verde, será otro de los elementos que los nuevos dirigentes terminarán reconociendo a Perotti, pues funcionará como un instrumento de certificación provincial para aquellas empresas y organizaciones que, además de cumplimentar la normativa ambiental vigente, realicen acciones que generen impactos ambientales positivos.
El Sello Verde será en el presente próximo y mucho más en el futuro, una herramienta básica para ingresar al mundo en la conquista de nuevos países que compren y disfruten nuestros productos. Esos que son y serán de la mejor calidad del mundo, porque nuestro suelo, nuestra agua, nuestro clima, aún dañado, siguen dando la diferencia y la sustentabilidad.
Lo que no se puede programar es la verba de los precandidatos en las campañas, en que sus palabras se alejan de la realidad, y en vez de usar esos esfuerzos para ponerse de acuerdo en los temas base que lleven a la población a superarse, con hechos, y no sólo en palabras. Por eso la gente valora mucho y valorará más las 20.000 viviendas que terminará entregando Perotti, volviendo a un eje de gestión iniciado en 1983, en donde la prioridad de los gobiernos peronistas está anclada en devolver a la sociedad su dignidad. Sustituir las chapas calientes que acucian en verano, o los cartones mojados que hieren en invierno, por un techo de material seguro, baños, y calefacción, elementos centrales para desarrollar mejores personas, mejores santafesinos y santafesinas.