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Once muertos y cuatro heridos en un presunto ataque de extrema derecha

Las primeras imágenes difundidas por medios germanos muestran un Mercedes gris claro, cubierto por una manta térmica forense y rodeado de cristales rotos, además de ambulancias. Horas después, al asesino lo encontraron muerto junto al cuerpo de su madre en su departamento

Un hombre mató a nueve personas e hirió a otras cuatro en la localidad alemana de Hanau, a 20 kilómetros de Frankfurt, y apareció muerto después en su domicilio junto al cadáver de su madre, en un episodio que la Fiscalía investiga como «terrorismo» motivado por creencias de extrema derecha, informaron las autoridades.

El sujeto, de 43 años, atacó por primera vez un bar de comida árabe (kebabs) y pipas de agua llamado Midnight, alrededor de las 22 de anoche (las 18 en la Argentina), y mató a varias personas antes de dirigirse a unos 2.5 kilómetros al oeste, donde realizó otro ataque indiscriminado.

Ambas zonas se encuentran acordonadas por los agentes de policía, indicó la agencia de noticias alemana DPA.

Fuentes de seguridad informaron a los medios alemanes que el atacante dejó una carta y un vídeo explicando sus motivos.

El diario Bild identificó al autor como Tobias R. Otros medios, a partir del contenido de la misiva y de que los dos locales donde se produjo la matanza están dedicados al consumo de kebabs y pipas de agua apuntan a la motivación xenofóbica.

La Fiscalía General del Estado alemán inició las investigaciones por delito de «terrorismo», informó el ministro del Interior del estado germano de Hesse, Peter Beuth.

El titular de Interior agregó que la Policía está evaluando actualmente la página web de autor de los disparos.

Los primeros resultados de esta evaluación apuntan a un motivo xenófobo», dijo Beuth, que también indicó que el hombre probablemente actuó solo.

«Hasta ahora no hay indicios sobre otros autores», dijo. Acto seguido condenó el ataque con estas palabras: «Es un acto contra nuestra sociedad libre y pacífica».

Las primeras imágenes difundidas por medios germanos muestran un Mercedes gris claro, cubierto por una manta térmica forense y rodeado de cristales rotos, además de ambulancias.

Testigos y videos de vigilancia permitieron a las autoridades llegar rápidamente a la casa del atacante -cerca del segundo ataque-, donde lo encontraron muerto cerca del cadáver de su madre de 72 años.

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