El último sábado este diario publicó una nota sobre un problema que se repite los fines de semana –especialmente durante la noche– con las denuncias contra cuidacoches quienes, según se suele destacar, llegan a pedir una suma fija de 30 pesos para que los automovilistas puedan estacionar en el sector del complejo La Fluvial. Tras esto, el último fin de semana, la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana realizó un operativo más amplio que los usuales junto a agentes de la Unidad Regional II con el que se montó una guardia en la zona para evitar abusos por parte de quienes piden cifras de dinero establecidas para “proteger” los vehículos y también se evitó que particulares estacionen en los distintos espacios públicos.
Desde la Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana contaron que la acción se llevó delante de 23 a 4.30 –entre el sábado y el domingo últimos –y allí “se controló y disuadió sobre el estacionamiento en las aceras y se habló con unas 16 personas que realizaban la actividad de cuidacoches. “Lo que se hizo fue identificarlas y se retiró a aquellos que quisieron establecer una tarifa fija”, destacaron.
“En un patrullaje de retorno se detectó a una persona intentando sustraer una cartera a una señora, se la detuvo y se la remitió a la seccional 15ª. Igualmente hay que aclarar que esta persona no estaba ofreciendo sus servicios para cuidar los vehículos estacionados en la calle”, agregaron desde el municipio.
Las denuncias contra los cuidacoches no son nuevas y en los últimos meses fueron detenidas varias personas por realizar cobros compulsivos, tanto en los lugares de diversión y esparcimiento como en recitales y partidos de fútbol, donde ya está establecido un auténtico mega-negocio que deja varios miles de pesos todos los fines de semana a grupos que controlan a los cuidadores, lo que deja de lado en estos casos la posibilidad de alguien de ganarse “unos pesos” convirtiéndose en una herramienta de extorsión aceitada y controlada.
Distintos testimonios recogidos por este diario contaron que en la zona de La Fluvial se piden 30 pesos para cuidar los autos, a modo de monto fijo. Esta actividad se encuentra en una especie de “limbo” legal. Desde el municipio suelen remarcar que si aquellos que trabajan como cuidacoches en la vía pública cobran según lo que les puedan dar los propietarios de los vehículos, “no hay mayores inconvenientes”. La situación cambia cuando la tarifa es compulsiva.
Cabe recordar que son varias las propuestas a lo largo del tiempo que buscan regular la actividad de los cuidacoches. El propio concejal Jorge Boasso suele insistir con el tema. Un proyecto presentado hace varios años propone la creación de un registro de personas que ejerce esta salida laboral, la entrega de credenciales y chalecos identificatorios y la prohibición de exigir el pago de una determinada suma de dinero a los automovilistas.
