Esteban Paulón (*)
Queridos Combatientes de Malvinas:
En las últimas horas, y en el marco de las celebraciones por el 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGBT+, se ha instalado una polémica en torno al izamiento de la bandera de la diversidad sexual en algunas localidades del país.
Y creo que algunas expresiones mal intencionadas han intentado manipular los hechos para instalar una pretendida brecha (otra grieta) entre dos colectivos sociales que venimos luchando contra la estigmatización, la invisibilidad y el olvido.
El 28 de junio no es un día más. Para nuestro colectivo es el recuerdo de un acto de resistencia ocurrido en 1969, un día en el cual levantamos nuestra voz más alta que nunca, para decirle basta a la violencia institucional y la persecución policial.
El Día del Orgullo no es un día de fiesta, es un día que recuerda cuánto camino nos queda aún por recorrer para poder alcanzar una sociedad sin discriminación y exclusión, una sociedad para todas y todos.
El izamiento de nuestra Bandera es una de las formas que encontramos para expresarle a la sociedad el orgullo que sentimos, no por nuestra orientación sexual o identidad de género, sino por poder vivir libre y abiertamente de acuerdo a lo que sentimos, a lo que somos.
Y que ese izamiento, junto a la Bandera Argentina, sintetiza el amor y el orgullo que sentimos por vivir en una nación que es modelo a nivel mundial, en materia de derechos humanos en general, y para la comunidad LGBT+ en particular.
Que algunos sectores minoritarios intenten contraponer el amor por nuestra Patria y nuestra bandera, al amor que sentimos por la bandera del arco iris es, lisa y llanamente, una ofensa a la inteligencia.
La mayoría de quienes conformamos el colectivo de la diversidad sexual amamos la celeste y blanca, sentimos orgullo por los y las próceres de nuestra historia y especialmente por Manuel Belgrano, un líder progresista que inspiró las luchas de la Independencia. Lejos estamos de algunos actos que se conocieron de agravio a la Bandera nacional. Eso no nos representa.
Les integrantes del colectivo LGBT+ sentimos profundo orgullo por nuestro país, por los derechos conquistados, y por nuestros Combatientes de Malvinas, quienes dejaron todo para defender nuestra Nación ante la usurpación extranjera. Porque también entre quienes lucharon, estuvieron muchos integrantes de nuestro colectivo, que seguramente llevaban ambas banderas cerca de su corazón.
Por eso quiero expresar mi profundo orgullo y eterna gratitud a Ustedes por la lucha sostenida, y también el convencimiento de que nada tuvieron que ver las organizaciones de Combatientes en los incidentes del fin de semana. Y hago aquí especial mención al Centro de Ex Soldados combatientes en Malvinas de Rosario, quienes estuvieron presentes este 28 de junio en la Plaza San Martín y no dejaron dudas de su acompañamiento permanente.
Sepan, queridos Combatientes, que recorremos el mismo camino, el del sueño de una Patria libre e igualitaria. En esa lucha contamos con ustedes y, ustedes, cuentan con nosotras, nosotros y nosotres.
* Director Ejecutivo IPP LGBT+