Luis Hernán Tourn y Sofía Barreto tenían 26 años y murieron al ser blanco de una balacera ocurrida el 1º de enero de 2018, cuando cenaban en la puerta de una casa en la zona de Grandoli y Seguí. En el ataque, otras tres personas resultaron heridas. Los tiros eran para uno de los comensales, que en ese momento se había levantado a buscar hielo. Este jueves, dos hombres fueron imputados por el doble crimen: uno de ellos es Enrique Adrián “Cable” Solís, señalado por los investigadores como miembro de la banda de Caminos que se disputaba el territorio con el clan Funes-Ungaro.
Eran cerca de las 22.30 cuando un grupo de personas cenaba en la vereda de una casa ubicada en Abanderado Grandoli al 3600. Luis era futbolista, era parte de la Liga Casildense, vivía en Cabín 9 y trabajaba en una distribuidora de golosinas mientras que Sofía era amiga de la novia de Luis. Así fue el punto de encuentro entre ambas víctimas. La chica no tenía problemas con nadie. Trabajaba y tenía una pequeña hija.
Las víctimas aceptaron una invitación a cenar junto con otras personas, entre ellos el cuñado de Luis, un hombre que había salido con permiso de la cárcel y que esa noche se levantó a buscar hielo cuando pasó un Chevrolet Corsa con cuatro personas a bordo, quienes dispararon indiscriminadamente contra el grupo. Luis y Sofía murieron en el lugar mientras que otras tres personas sufrieron heridas: María del Carmen C., Juan José M. y Juan Pablo, quien estuvo grave tras recibir un plomo en la cabeza.
Para los investigadores, los tiros eran para el cuñado de Luis y atacaron sin tener en cuenta el resto de la gente que había en el lugar, llevándose la vida de dos personas que nada tenían que ver con la disputa. Este jueves, el fiscal Ademar Bianchini imputó a Cable Solís por el hecho. Le achacó ir al mando del auto que llevó a los tiradores hasta el lugar, mientras que sindicó a José Damián P. como otra de las tres personas que iban en el Corsa. Ambos fueron imputados por homicidio y tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, calificado por el concurso premeditado de dos o más personas. A José P. además le sumó el delito de portación de arma de guerra.
Romina Bedetti, la defensora de Cable, dijo que lo acusan de cometer dos hechos a la misma vez y citó la imputación que pesa sobre su cliente por la tentativa de homicidio de Jorge Funes; pero el fiscal Bianchini dijo que hay una diferencia de dos horas entre un hecho y el otro. La imputación fue admitida por el juez Héctor Núñez Cartelle, que dictó la prisión preventiva en contra del dúo.
Cable
Además de la balacera contra Jorge Funes ocurrida ese primero de año en Alvear, Cable tiene en su haber una imputación por el crimen de Ulises Funes ocurrido el 7 de enero de 2018 y de su hermano Jonatan ocurrido un mes más tarde a la salida de la cárcel de Piñero. Mientras que el mes pasado, el fiscal Luis Schiappa Pietra lo imputó por el crimen de Lorena Ojeda, una adolescente de 16 años que fue asesinada el 16 de diciembre de 2016. Su hermana, Brisa, fue testigo del crimen de su pareja e iba a participar en una rueda de reconocimiento. Gritaron su nombre aquella noche en la puerta de la casa que habitaba en Vera Mujica al 2900 y se asomó Lorena, quien recibió los tiros. Treinta y seis días después la chica falleció.
Hace una semana, Samanta García, de 22 años y hermana de Cable, fue asesinada mientras baldeaba la vereda de un vecino en Mitre al 3100. Sus familiares y conocidos no se explican el motivo mientras que los investigadores no descartan la hipótesis de que la motivación haya sido una venganza relacionada a la disputa entre los clanes de Caminos y los Funes – Ungaro.
Brutal ataque en Grandoli y Seguí: «Las víctimas estaban en el lugar equivocado»
