El Shanghái Greenland de la liga china (conocido como Shanghai Shenhua hasta la temporada pasada) contrató nuevamente al exseleccionador argentino Sergio Batista como entrenador para 2014.
Batista entrenó al Shenhua desde mayo de 2012 hasta junio pasado, coincidiendo con uno de los períodos más polémicos del club chino, que en esos meses fichó y perdió, por dificultades económicas, a estrellas como Nicolas Anelka, Didier Drogba, Rolando Schiavi y Patricio Toranzo.
El equipo chino, capitaneado por el colombiano Giovanni Moreno y donde juegan también su compatriota Luis Carlos Ruiz y el brasileño Paulo André, trata de levantar cabeza esta temporada después de que una multa por amañar el campeonato de 2003 y una larga disputa entre sus accionistas acabase en enero con la venta parcial del club.
El nuevo accionista principal, el grupo inmobiliario shanghainés Greenland, parece haberle devuelto al menos el respaldo económico suficiente para volver a atraer a Batista y recuperar la normalidad en el equipo, que el año pasado llegó a sufrir una huelga de sus futbolistas sudamericanos, en protesta por el impago de sus sueldos.
«Después de negociar, hemos tomado la decisión de traer de vuelta a nuestro viejo amigo Batista como entrenador», explicó el nuevo presidente del club, Wu Xiaohui, según recoge el diario oficial «Shanghái Daily».
El equipo, que sigue siendo conocido entre prensa y aficionados como Shenhua («Flor de Shanghái») sumó en lo que va de temporada cuatro puntos en cuatro partidos y está en undécima posición (de 16), tras acabar octavo el año pasado.
«El Shenhua sigue siendo un equipo competitivo con muchos buenos jugadores, y es por eso por lo que decidí volver», dijo Batista en su presentación, este fin de semana: «Estoy seguro de que podemos estar en una posición más alta de la clasificación al final de la temporada».
«Me gusta Shanghái», aseguró Batista al anunciar su regreso: «Pasaraon muchas cosas desde que dejé el club el año pasado, y quiero agradecer al club su confianza, es un honor estar de vuelta».
Batista, de 51 años, había dejado el club en julio, al igual que sus compatriotas y que Anelka y Drogba, entre rumores de impagos.
El Shenhua, hermanado con el Atlético de Madrid desde 2009, arrastró durante años graves problemas de financiación por disputas internas entre su anterior presidente, el joven magnate de los videojuegos Zhu Jun, y cinco inversores estatales que se negaron repetidamente a contribuir al equipo lo que habían acordado con Zhu.
El magnate reaccionó en 2012 suspendiendo sus inyecciones unilaterales de fondos al club, lo que ahuyentó a sus jugadores estrella, que empezaron a marcharse por acumulación de impagos.
La situación se complicó aún más cuando la federación china multó al equipo por amañar partidos en 2003, lo que le valió la retirada de aquel campeonato, uno de los dos que había ganado hasta la fecha, junto con el de 1995, mientras los socios estatales se negaron también a pagar su parte de aquella multa.
El histórico Shenhua estuvo así a punto de marcharse de Shanghái para ser rescatado por una empresa de Kunming, a 2.000 kilómetros de distancia, pero las autoridades locales no lo autorizaron, y finalmente fue Greenland la que compró en enero el 28,5 por ciento del club que hasta entonces tenía Zhu Jun, quien lo abandonó.