Entre la mañana y las primeras horas de la tarde de este lunes Rosario registró dos siniestros viales que involucraron móviles policiales. El denominador común de ambos choques, ocurridos en el microcentro y en barrio Tiro Suizo, fue la alta velocidad de los patrulleros y la ausencia de sirenas. Ninguno de los dos casos arrojó víctimas fatales.
La primera colisión no estuvo exenta de dramatismo, en una intersección con afluencia de tránsito, gran cantidad de peatones y que ya motivó el reclamo de una instalación de semáforos. Pasadas las 11 de la mañana, en 9 de Julio e Italia, una chata policial impactó de lleno contra un Ford Fiesta conducido por dos hombres, que son padre e hijo. Este vehículo quedó ruedas para arriba en la vereda y sus ocupantes, de 58 y 89 años, fueron asistidos por vecinos y una ambulancia del Sies.
Los médicos diagnosticaron fractura de muñeca y un corte en la mano para el paciente de 58; el mayor, en tanto, sufrió un traumatismo cervical y de pelvis, confiaron los profesionales del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies). Según testimonios, el hombre de edad avanzada fue despedido, mientras que su hijo fue rescatado del interior del auto.
La trompa del patrullero quedó arruinada. Los testimonios recogidos en la zona indicaron que el móvil iba a gran velocidad y sin sirenas. Los uniformados resultaron ilesos.
Sarmiento al 4800
Pasadas las 13, la esquina de Sarmiento y Benito Juárez (Sarmiento al 4800), en barrio Tiro Suizo, fue escenario de otro encontronazo, esta vez entre un Peugeot 207 sedán en el que iba una pareja y un patrullero Ford Focus. No hubo que lamentar más que daños materiales y golpes, confiaron los ocupantes del coche civil.
“Sentí el impacto y no sé más nada. Fue tan rápido que me pegué un susto. Estamos bien fue un accidente con suerte. Ellos venían muy fuerte, no tenían sirena”, dijo la mujer que iba en el Peugeot y contó que tanto su marido como un uniformado fueron atendidos por una ambulancia del Sies en el lugar.