Ante la expansión de la circulación del virus Zika en la región –transmitido por el mismo mosquito que es vector del dengue y la fiebre chikungunya– y la confirmación de la asociación entre su acción y el aumento de casos de microcefalia en Brasil, la Dirección de Promoción y Protección del Ministerio de Salud de la provincia emitió un alerta con recomendaciones para prevenir el contagio y la introducción de la enfermedad en la Argentina. Se pide a la población poner especial atención, habida cuenta del aumento del turismo en ambos sentidos en particular durante el verano, y el mayor riesgo en la estación que comenzará en pocos días de contraer por picaduras enfermedades transmitidas por los insectos.
La directora de Promoción y Protección de la Salud, Andrea Uboldi, recordó que en la actualidad nueve países de la región y de Centro y Norteamérica presentan circulación autóctona de virus Zika: además de Brasil, son Paraguay, Colombia, Venezuela, Surinam, El Salvador, Panamá, Guatemala y México.
El virus fue identificado en 1947 en los bosques de Zika, Uganda. El contagio puede causar síntomas como fiebre, conjuntivitis, artritis transitoria, dolor en las articulaciones, erupciones en la piel. Los cuadros son más leves que los casos de dengue. El más peligroso es la relación investigada en Brasil entre el contagio de fiebre Zika y el aumento de casos de nacimientos con microcefalia, una enfermedad neurológica en la que la circunferencia de la cabeza es menor que el promedio que se corresponde con el tamaño, sexo y edad de un bebé. El riesgo de contraer ese trastorno se extiende hasta los primeros años de vida de los niños.
“En mayo pasado, las autoridades de salud pública de Brasil confirmaron la transmisión autóctona de virus Zika en el nordeste de ese país, siendo el primer registro de circulación autóctona en América continental”, explicó Uboldi. Y marcó que hasta el momento se han registrado tres fallecidos relacionados con la infección por Zika: “un recién nacido con microcefalia, un adulto con antecedente de lupus y una adolescente de 16 años sin enfermedad de base”.
El pasado 11 de noviembre, Brasil declaró el estado de emergencia en salud pública por casos de microcefalia en recién nacidos del estado de Pernambuco; en tanto que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitieron un alerta advirtiendo sobre el inusual incremento de casos de microcefalia en el noreste de ese país.
También la OMS y la OPS difundieron un nuevo alerta epidemiológico advirtiendo sobre el incremento de anomalías congénitas, síndrome de “Guillain Barré” y otras manifestaciones autoinmunes en zonas donde circula el virus Zika, y su posible relación con éste. En el mismo documento, se consigna que la tasa de microcefalia en Brasil se incrementó más de 20 veces.
De los casos de estudiados hasta el momento, se pudo confirmar la infección por virus Zika en un recién nacido en el estado de Ceará, en el noreste de Brasil.
“En este sentido, todas las personas que viajen a Brasil deben extremar los cuidados, pero muy especialmente las embarazadas, ya que se confirmó la presencia de Zika en muestras de líquido amniótico de dos mujeres que presentaban fetos con microcefalia. Ambas habían sufrido síntomas de infección por este virus durante la gestación”, marcó Uboldi.
En cuanto a las recomendaciones, se asocian a la prevención del dengue: reducir criaderos de mosquitos en casas y alrededores, que son los recipientes en los que puede acumularse agua (latas, baldes, tachos, neumáticos) tapándolos, poniéndolos boca abajo o desechándolos. Mantener tapados los tanques y recipientes que se usan para recolectar agua, desmalezar patios y jardines y destapar desagües y reemplazar todos los días el agua de floreros, bebederos de animales y otros recipientes en uso.
También, instalar mosquiteros y usar repelentes o ropa que proteja contra picaduras.
En caso de viajar a lugares con presencia del virus de Zika, evitar zonas con presencia de mosquitos, utilizar repelentes sobre la piel expuesta y sobre la ropa y evitar estar al aire libre en el amanecer o anochecer.
Asimismo, si durante el viaje se presenta fiebre, se debe acudir a un centro de salud local, sobre todo en el caso de las embarazadas, y continuar con las medidas adecuadas para protegerse de las picaduras de mosquitos.
Se enfatizó que no hay que automedicarse y, en el caso de las embarazadas, consultar antes del viaje a su obstetra y extremar las precauciones personales para evitar mosquitos. Y al regreso de una zona afectada, se recomienda a las embarazadas que consulten a su médico.