La petrolera Raizen, licenciataria de la marca Shell, informó que desde este miércoles aumentaba un 3,8% en promedio el precio de todos sus combustibles, en un incremento que se dio a conocer horas después de que el INDEC anunciara la inflación de febrero.
La decisión se da en el marco del acuerdo alcanzado entre las petroleras y el gobierno, por el que los combustibles forman parte del programa Precios Justos y pueden aumentar en marzo ese porcentaje.
De esta manera, se espera que las otras empresas se sumen a las subas en las próximas horas.
Este es el cuarto aumento autorizado por el gobierno y desde este miércoles el precio de la nafta súper en las estaciones de servicio de Shell dentro de la Ciudad de Buenos Aires ronda los $169,07, mientras que el de la nafta premium es de $205,33.
En tanto, el gasoil común cuesta $189,05 y el premium, $245,41.
En diciembre como en enero y febrero la suba fue del 4% mientras que en marzo el aumento es del 3,8%, según lo acordado con la Secretaría de Comercio. Así, la actualización de precios intenta absorber mínimamente los incrementos en los biocombustibles, como así también los costos logísticos y variación en el tipo de cambio oficial que afecta el precio de las materias primas que se utilizan para la producción de combustibles.