El hombre acusado de matar a golpes a su hija de diez meses está internado y será intervenido quirúrgicamente ya que se tragó elementos cortantes con la finalidad de quitarse la vida. El imputado había explicado durante la declaración indagatoria que le tomó este jueves el juez Juan Adrés Donnola que se había tragado una gilette y por eso el juez ordenó que lo revisara un médico forense.
Pero el profesional no notó nada raro. Más tarde, el acusado insistió con su versión y lo trasladaron al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, donde se le realizaron estudios que determinaron que se había tragado la punta de un cuchillo y un trozo de un encendedor.
«Tragó parte de un encendedor y otros elementos, y ahora tendrá que ser intervenido quirúrgicamente para que le sean extraidos los objetos», contó el magistrado. El hombre, identificado como Walter S., de 24 años, fue denunciado por su pareja Miriam por haberla agredido a ella y a la criatura durante una discusión el sábado pasado.
El joven en cuestión está imputado de homicidio agravado por el vínculo y abandono agravado de persona, debido a que aparentemente impidió que atendieran a la beba cuando ya había sido golpeada.
Según aclaró Donnola, quien pudo tomar la indagatoria completa al imputado, que según otras fuentes judiciales negó las acusaciones que se le hicieron, dijo que lo que le sucedió a la beba de 10 meses es que se le cayó, y no que le pegó como habían manifestado.
