Ramón, el padre de una de las víctimas del doble crimen descubierto en la mañana de este viernes, no encontraba consuelo tras llegar hasta el lugar donde hallaron los cuerpos de los dos muchachos, en el límite oeste de Rosario. “Era pintor conmigo. Tenía 22 años. Se llamaba Brian Molina. Lo reconocí por la ropa, porque había salido con una bermuda y una campera negra”, alcanzó a decir el hombre ante los cronistas que fueron a cubrir el hecho.
El padre de Brian agregó que le había mandado mensajes al muchacho la noche anterior, para preguntarle dónde estaba ya que sabía que antes había ido a la casa de una tía. Pero para entonces, el celular de Brian estaba apagado.
El hombre dijo que no conocía a la otra víctima, que estaba con su hijo en el Volkswagen Suran gris que quedó al lado de los cuerpos con las puertas abiertas. Se trata de Dylan Joaquín Valenti, de 18 años. Sin embargo, señaló que la madre del chico lo había llamado por teléfono, y que no entendía cómo había conseguido su número.
Encontraron los cuerpos de dos jóvenes ejecutados con tiros en la cabeza en el límite oeste
“Ahora cómo hago que no tengo más a mi único hijo”, se preguntó desconsolado el padre de Brian, quien cuestionó el accionar de la justicia en medio de un reguero de sangre en la ciudad. «Hasta ayer estaba tranquilo. Nunca tuvo problemas con la justicia”, agregó desconcertado respecto al joven de 22 años que, aseguró, iba a trabajar con él todos los días.