Agustín Muñoz tenía 18 años y vivía en Bariloche. Durante una marcha convocada bajo la consigna «Nunca más solas, nunca más calladas» de la que participó en esa ciudad rionegrina, una amiga de la misma edad lo acusó de abuso sexual. La chica admitió luego que la incriminación era falsa, producto de «un momento de bronca y enojo». Pero ya había colgado su denuncia en las redes sociales y, a pesar de las aclaraciones reiteradas de su parte, ese escrache se expandió y a la viralización se sumaron algunos portales. El joven terminó suicidándose. Había caído en una depresión aunque no está claro si es por la saga previa. Sus padres difundieron el sábado pasado un video en el que exponen el peligro de replicar este tipo de acusaciones sin criterio ni pruebas, tanto como el uso que se hace de las mismas. Y, pese al dolor, pusieron a salvo de las críticas a la chica que inició la cadena, a su vez blanco de mensajes tan violentos como los que había recibido antes su amigo.
“Somos los papás de Agustín Muñoz. Es de público conocimiento que él se quitó la vida hace una semana”, se escucha a Silvina Castañeda en el comienzo del video.
“Si queremos construir una sociedad, tenemos que construir adultos con herramientas para subsistir en este mundo. Agustín no está, fue una decisión que tomó. Drástica. No recibió la contención suficiente desde la sociedad, a raíz de esta situación última. Y yo, acá, como representante de mi hijo, pido, sin echarnos en contra de las luchas de cada víctima de abuso, de falta de justicia, pido que se tome conciencia de que estamos jugando con algo muy delicado, estamos hilando fino, estamos exponiendo a nuestros jóvenes”. Es parte del mensaje de Silvina Castañeda, que grabó las imágenes junto al padre de Agustín y amigos del joven.
Más tarde, la mujer habló con algunos medios y reiteró el llamado: “Pedimos que se termine con esta persecución, que no sirve, con una persona que se equivocó (por la chica que hizo la denuncia falsa). Agustín la perdonó. Sólo busqué generar conciencia, no odio hacia un ser humano», aseguró al portal Bariloche2000. «Mi hijo la perdonó y eso es importantísimo. Dejen de atacar a la chica, su familia está sufriendo terriblemente», insistió Silvina Castañeda.
«Estamos acompañados de jóvenes que piden que se termine esta persecución de escraches y de perseguir a una persona que se equivocó como es Ani, la amiga de Agustín, porque Agustín la perdonó, tuvo la nobleza de perdonarla», se escucha en el video a la madre del chico. “Mi hijo fue una víctima de toda esa desidia social que tenemos nosotros como adultos. No puede haber un Agustín más. Tomemos consciencia y que los chicos se sientan protegidos por nosotros. Pido también respeto por los menores de edad, y que no existan listas negras de chicos que son condenados a morir”, pidió la mujer.
https://www.youtube.com/watch?v=jcd3yWzrdGQ
Necesitamos impulsar protocolos en cada escuela, en cada espacio laboral, para que las denuncias por abusos se hagan en los lugares adecuados, con contención, y se eviten los escraches para que esto no vuelva a pasar: https://t.co/VL5oSTeEwD pic.twitter.com/EqmgCdyAuv
— 💚 Victoria Donda Perez 💚 (@vikidonda) 30 de diciembre de 2018
El ánimo de linchamiento comenzó con Agustín y, al conocerse que la denuncia en su contra no era cierta, se repitió con la chica que lo acusó. Los padres del joven insistieron en que ambos terminan siendo víctimas de la irresponsabilidad de quienes replican mensajes sin responsabilidad y por razones no siempre claras. Un dato más lo aportó la prima de Agustín: “Mi primo no cometió suicido por un escrache, pudo haber sido un detonante como no, pero él tenía sus razones personales y no tienen por que viralizar información que no es real por que ofenden a todos”, pidió la muchacha desde su cuenta de Twitter.