La titular del Pami, Luana Volnovich, reveló este miércoles que durante la gestión anterior, el organismo interrumpió el suministro de más de 37 mil cajas con bolsas de ostomías que debían ser entregadas a sus afiliados y, en lugar de ello, se encontraban retenidas en distintas droguerías del país.
Así lo reveló una auditoría encargada por la nueva gestión, por lo que adelantó que la provisión de estos insumos «se normalizará».
«Esto demuestra que hubo una gran desidia durante la gestión anterior y que no se cuidó a los afiliados. Hay miles de cajas que no se entregaban y que costaban entre 3 mil y 4 mil pesos y también descubrimos reintegros que no llegaban», señaló Volnovich.
La funcionaria habló en un depósito de la empresa Correo Argentino, ubicado en la localidad de Tortuguitas, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas, donde fueron llevadas 10 mil de estas bolsas que se utilizan para colectar deposiciones tras la realización de prácticas quirúrgicas como las colostomías, ileostomías y urostomías.
La auditoría a la obra social de los jubilados detectó hasta ahora 30 mil cajas, pero la estimación es que la cifra podría llegar a las 37 mil, en tanto que una cantidad no precisada todavía “podría haberse perdido”, sin llegar a los afiliados que las necesitaban.
Estos materiales estaban guardados en depósitos de diversas empresas y desde hace más de un año, cerca de 8.600 afiliados del Pami tenían problemas para acceder a ellos, y en octubre, el organismo dejó de entregarlas a los beneficiarios de esta obra social.
En las cajas hay material vencido y próximo a dejar de ser utilizable, por lo que desde el organismo quieren «acelerar la entrega de estas cajas cuanto antes».
Por eso, la primera tarea fue relevar dónde estaban estos insumos, reunirlos en depósitos y centros de distribución del Correo y otros que están en distintos puntos del país para “comenzar la distribución de manera urgente», precisaron desde el Pami.
Cada una de estas cajas contiene entre 10 y 30 bolsas para ostomías, y tienen un valor que oscila entre los 3 mil y los 4 mil pesos, de acuerdo a lo detallado desde el organismo.
Se trata de materiales importados o materiales de producción nacional, y los funcionarios a cargo de la auditoría detallaron que en muchos casos, «los remitos no concuerdan con el contenido de las cajas».
Además de los problemas en las entregas, lo que también se verificaban eran dificultades para realizar los reintegros a los afiliados, quienes ante la imposibilidad de acceder terminaban pagando de su bolsillo las bolsas y pedían el reembolso, que tampoco obtenían.
Es el caso de Nilda Josefa Cisneros, quien este miércoles estuvo presente en la visita que los funcionarios del Pami hicieron al depósito de Tortuguitas.
Nilda contó que su sobrina y empleada del Correo Argentino Mónica Guardo veía a diario como ingresaban al depósito bolsas de ostomía que debían ser destinadas al Pami, y le llamaba la atención que su tía le contara todos los problemas que tenía para conseguir el insumo.
«Tuve que pagarme la medicación de mi bolsillo. Por día tenía que usar hasta tres bolsas y cada caja me costaba hasta 3.500 pesos. No me hacían los reintegros y me gaste en remedios la plata del bono del último aumento que nos dieron», indicó la mujer, que se jubiló con la moratoria que se aplicó durante el gobierno de Néstor Kirchner.
Hoy, Nilda estuvo frente a Volnovich, quien de forma simbólica le entregó una caja y le prometió que se le harán a esta pensionada «todos los reintegros que correspondan».
Volnovich adelantó que la intención es que el Pami primero normalice las entregas y luego, con la ayuda del Correo, lleve estas cajas a los afiliados que las demandan.
«El acopio del material que distribuye el Estado no puede depender de la iniciativa privada. Por eso la idea es ahora llegar a todos lados, donde los afiliados necesiten los materiales», indicó por su parte la titular del Correo Argentino, Vanesa Piesciorovski.