El senador por el Frente para la Victoria (FpV), Aníbal Fernández, planteó hoy que «sería un suicidio» flexibilizar las restricciones que impuso el Ejecutivo nacional para la compraventa de dólares, en una jornada cambiaria en la que el billete operó en baja en el mercado paralelo.
Según el legislador, «si una persona se está manejando con dinero que no está declarado, no se puede comprar dólares. Y en función de eso, se irán abriendo los controles que se van practicando, de forma tal de poder tener controlado el movimiento del mercado cambiario».
Este lunes, el gobierno de Cristina Kirchner oficializó su decisión de establecer un régimen de información adicional sobre las personas que necesiten moneda extranjera para viajar al exterior: lo hizo a través de una resolución publicada hoy en el Boletín Oficial.
En este marco, el billete estadounidense se mantuvo estable en las pizarras minoristas de las principales casas de cambio y bancos de la zona financiera porteña, a 4,45 pesos para la compra y $ 4,49 para la venta.
Mientras tanto, el dólar paralelo volvió a tropezar y cerró a un promedio de $ 5,85 modo vendedor en la ciudad de Buenos Aires, después de haber tocado un techo de $ 6,14 la semana pasada, antes del feriado del viernes.
Justamente, ese día desde San Carlos de Bariloche, Cristina en su discurso por el 202º aniversario de la Revolución de Mayo de 1810 sugirió que los inversores que apuestan al dólar pierden y defendió las restricciones.
Este lunes, en declaraciones al canal de televisión Telefe, Fernández descartó de plano la posibilidad de flexibilizar los controles en el mercado cambiario.
Sostuvo en este sentido que «la situación que más ha impactado y que más ha frenado el movimiento» cambiario, se relaciona con las medidas adoptadas para certificar que «el dinero viene de una situación legal».
El senador kirchnerista defendió, además, el sistema de «flotación administrada» del dólar: puntualizó que se aplica «en función de los intereses de los argentinos».
«La Argentina tiene que tomar un montón de decisiones que hacen al conjunto de los argentinos en cuanto a su balanza comercial, sus importaciones, sus exportaciones y la cotización cambiaria», enfatizó.
Fernández afirmó que «para cada una de los temas, hay una receta» y justificó al «Estado promotor que debe inmiscuirse en cada una de estas acciones e ir tomando las decisiones».
«La realidad es que al final de la carrera, que es muy corta porque el objetivo es a corto plazo, (la idea) es ir resolviendo los problemas e ir encontrando la salida para que se vayan cumpliendo los objetivos en beneficio de todos los argentinos», manifestó el ex jefe de Gabinete.
Este lunes, en la «City» porteña, la moneda estadounidense cotizó con un alza de casi un centavo en el mercado mayorista, en el arranque de la última semana del mes, con un magro volumen negociado producto de un feriado en Estados Unidos.
La conmemoración del «Memorial Day», día en el que se recuerda a los miembros de las Fuerzas Armadas del país del norte que fallecieron en combate, trajo aparejado que el jueves pasado las principales entidades cambiarias y financieras del sistema ávidas de divisas con liquidación a plazo, dejaran cubiertas sus posiciones para mañana martes.
Por ello, la ronda de hoy apenas sirvió para cubrir operaciones específicas de clientes, según destacaron operadores de la firma Puente SA.
De todas formas, y con la ausencia de la autoridad monetaria que no suele intervenir en este tipo de ruedas, la demanda se percibió poco más firme que días atrás.
Así, la moneda estadounidense arrancó la jornada cotizando en $ 4,475 por dólar y continuó con algunos altibajos hasta un techo de $ 4,48.
Ya asomando el cierre la aparición de algunos vendedores lastimaron una demanda que había pasado a ser frágil, por lo que el tipo de cambio retrocedió todo lo ganado.
Con un volumen negociado que apenas totalizó U$S 159 millones, la divisa estadounidense terminó cotizando en $ 4,474 por dólar: 4 milésimas por encima del cierre anterior.
Por último, las pizarras minoristas del microcentro porteño culminó la jornada a $ 4,45 para la compra y $ 4,49 para la venta, en tanto, el euro cerró en $ 5,59 modo comprador y $ 5,74 modo vendedor.