El titular del gremio de los Gastronómicos, Luis Barrionuevo, sostuvo que la presidenta Cristina de Kirchner «le sacó el banquito» a Hugo Moyano y señaló que marzo próximo será el límite para la ruptura definitiva de relaciones de la CGT con la Casa Rosada.
«La Presidenta le sacó el banquito a Moyano y no Moyano a la Presidenta. Este problema que tiene que ver con los trabajadores se va a profundizar aún más», indicó el líder de la CGT Azul y Blanca en declaraciones radiales.
A propósito, señaló que si no hay «soluciones» a los problemas planteados por la CGT, en marzo próximo Moyano tendrá dos opciones: «O toma un plan de lucha, que es lo natural, o convoca al Congreso (de la central obrera) y cambia las autoridades».
«Adhiero a todo el reclamo del movimiento obrero, que hoy quienes eran sus socios no atienden. Marzo es el límite, cuando la CGT tiene que tener respuestas. Y, sino, deberá adelantar el Congreso para tener nuevas autoridades», indicó respecto de la cumbre que debe reunirse en julio próximo, cuando vence el mandato de Moyano.
En esta línea, Barrionuevo, quien mantiene una relación cercana al ex presidente Eduardo Duhalde, acusó a la Presidenta de «hipócrita», porque -según dijo- «no tiene nada que ver con el movimiento obrero».
«Antes Moyano levantaba el teléfono y se hacían pipí los ministros y ahora no lo atienden. Eso es una falta de respeto y la orden la dio la Presidenta», cuestionó, y agregó que el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, «se abraza a Moyano y le pide que no se vaya porque está solo en el Ejecutivo» de la provincia.
