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Para los pibes de Salta, su día será el domingo 7 de agosto

Por Luciana Sosa. La ONG Juntos por una Vida Mejor recibe donaciones para llevar a chicos del norte en su día.

Son sólo dos mujeres que dan su aporte a la sociedad. Son dos mujeres que dejan de lado por unos minutos sus ocupaciones cotidianas y dedican mucho más esfuerzo a personas que no conocen, que viven lejos de su ciudad natal y necesitan de su ayuda. Miriam y Alejandra hace un año que emprenden campañas de donaciones de particulares para entregarlas en el norte argentino a las comunidades de La Merced y Pozo del Bravo, en Chaco, bajo el nombre Juntos por una Vida Mejor. En esta ocasión recibirán la ayuda hasta el 15 de julio, con el objetivo de celebrar el día Del Niño en Pozo del Bravo.

“Hace un año hicimos el primer viaje de esta locura con la que cada vez nos comprometemos más”, declaró Miriam Gori a El Ciudadano. “En la primera visita al norte obtuvimos y pudimos llevar 4 pupitres escolares, camas, colchones, ropa, alimentos, bicicletas y agua. Porque allí no tienen agua ni luz, por eso es tan o más necesaria que la comida misma”, sostuvo.

Por otra parte, en marzo, el segundo viaje contó con la ayuda de un camión repleto de muebles, ropa y calzado para ambas comunidades. En tanto, este agosto próximo celebrarán el Día del Niño y para ello esperan la solidaridad de toda una ciudad. “Esperamos que la gente siga acompañándonos con la donación de camas, colchones, calzado, agua y alimentos. Por otro lado, esta vez, al ser el Día del Niño el motivo del viaje, estamos recolectando alfajores, leche larga vida, chocolatada, galletitas, juguetes (excepto de peluche para que la tierra no quede en ellos) y demás elementos que mejoren un poco la calidad de vida de estos chicos”, adelantó.

Asimismo, aseguró que si bien agradecen la colaboración de los ciudadanos en cada campaña, “lamentamos que se haya engañado tanto a la gente en movidas solidarias anteriores, a nivel local o nacional; es por eso que para garantizar la veracidad de nuestro trabajo publicamos algunos videos en Youtube y publicamos las fotos en nuestro Facebook (“juntos una vida mejor”). Es más, nosotras mismas somos las que acompañamos las donaciones a destino, somos las que entregamos lo recaudado a las manos que lo están esperando, buscamos dar la mayor transparencia posible a cada campaña”.

En otra instancia, Gori señaló que el nombre Juntos por una Vida Mejor está en vías de legalizarse, debido a que muchas empresas les han cuestionado la ausencia de una personería jurídica para poder ayudarlos. “Yo soy empleada, Alejandra es maestra jardinera, hacemos todo esto desde el corazón, no sabemos cómo actuar ante casos de burocracia plena que frenan la alimentación de un chico que jamás se puso unas zapatillas. No lo entendemos, pero para no chocarnos nuevamente con este tipo de inconvenientes, porque no hay tiempo para otros «no», tramitamos la personería jurídica y obtendremos nuestra identidad en poco tiempo. Fue un esfuerzo más de todo el que hemos realizado y seguiremos entregando todo por estas familias”, exclamó la mujer.

Paso a paso, uniendo lazos

El 27 de julio se cargará el camión que llevará las donaciones a destino, la celebración será “como debe ser: el primer domingo de agosto. No nos sumamos a la cuestión comercial del segundo domingo de ese mes, siempre fue el primero y estos chicos van a celebrarlo ese día”, aclaró. Pero hasta el 15 recibirán las ofrendas. “Suele ser mucho y tenemos que organizarnos para poder entregar el material como corresponde”.

Paralelamente, la mujer afirmó que en cada viaje se ha conocido más gente que se suma a esta iniciativa. “En los últimos viajes hemos conocido mucha gente solidaria, tal vez algunos no tengan mucho para dar, pero de a poco nos han pagado el viaje de los camiones que han trasladado las donaciones y eso es un aporte muy grande para nosotros. A su vez, hubo mucha gente que nos contactó con empresas, negocios, particulares que nos dieron su apoyo”, relató.

El origen de la idea solidaria

Gori comentó que este afán por ayudar a los chicos del norte argentino surgió luego de ver un video en el que el cantante Jorge Rojas presentó el festival de Cultura Nativa. “Cuando lo vimos pudimos ver algunas imágenes que nos estremecieron y por eso decidimos investigar un poco más y fue entonces cuando nos comprometimos con esta tarea. Tanto buscamos y nos comunicamos con organismos que nos podrían asesorar que un día recibimos el llamado de Jorge Rojas. Él se ofreció a esperarnos cuando fue nuestro primer viaje y nos asesoró mucho en la logística de este tipo de actividades”, relató.

Al mismo tiempo, el cantautor folclórico les ofreció la ayuda de su familia entera en este recorrido por las zonas de La Merced y Pozo del Bravo.

“Él conoce mucho el terreno y nos explicó dónde y qué tipo de donación podemos alcanzar. También ha suspendido compromisos artísticos para acompañarnos en algunos de los recorridos. La verdad que además de ser una familia de grandes artistas, los Rojas tienen un gran corazón”, destacó.

Inclusive se supo que esta familia de músicos folclóricos ha ayudado a las mujeres de la ONG rosarina a concretar el proyecto de baños comunitarios en la comunidad de La Merced, donde habitan unas 48 familias numerosas. “Ellos no tienen baños, de hecho hasta hace muy poquito no tenían agua, por eso planeamos y concretamos la realización de este tipo de baños. Afortunadamente contamos con las donaciones de Ferrum (en Buenos Aires) en cuanto a los inodoros, bachas y demás artefactos. La gente nos donó cal y con algo de dinero que teníamos Alejandra y yo, además del aporte de otro particular, pudimos comprar los hierros y caños. Una vez que llegamos con estos bultos la gente de esa zona no lo podía creer”.

Más tarde crearon la biblioteca comunitaria. “Fue una gran emoción ver a tanta gente trabajando para terminar la biblioteca en un día y medio. Desde Rosario llevamos los estantes y demás muebles que nos donaron y pudimos restaurar en una carpintería amiga. Los libros fueron una gran sorpresa para todos porque muchos de ellos ni siquiera sabían de qué se trataba”.

Quienes puedan ayudar en la próxima convocatoria, pueden comunicarse a los teléfonos 156 898638 o 155 141531 y ellas mismas pasarán a buscar la ofrenda.

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