Una doble jornada de lucha en busca de justica por dos emblemáticos casos de gatillo fácil en Rosario tendrá lugar este fin de semana en la ciudad. Con ollas populares y mateadas se pintarán murales los días sábado y domingo para “pelearle al frío y el olvido”, dijeron desde la Multisectorial contra la Violencia Institucional en memoria de Franco Casco, David Campos y Emanuel Medina.
Franco
La primera cita es este sábado a las 12 en Plaza de las Américas (Salta 3300, esquina Iriondo) donde se pintará un mural de Franco Casco, y luego se hará una olla popular, con motivo del día que cumpliría años el joven que en octubre de 2014 apareció flotando en el río Paraná luego de una oscura detención en la seccional 7° de Rosario. El caso es investigado por la Justicia Federal como desaparición forzada seguida de muerte luego de que distintas medidas probatorias dieran cuenta de que dentro de la seccional Franco fue sometido a torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes en el calabozo de esa comisaría. La pesquisa hay 18 polcías procesados a la espera de ser juzgados en un juicio oral y público.
“El sábado Franco cumpliría 25 años”, dijo a El Ciudadano su papá Ramón quien también recordó que este jueves cumpliría años la mamá de Franco, quien falleció esperando justicia por la muerte de su hijo. Ramón contó que pintarán un mural con la cara de su hijo en esa plaza por está en la zona donde el muchacho fue detenido por la Policía. En relación a los uniformados procesados por matar y ocultar la muerte de franco, Ramón dijo que todavía no hay fecha de juicio pero que los últimos resultados de la segunda exhumación del cuerpo de su hijo ya fueron presentados a la Justicia.
David y Ema
La segunda cita es este domingo a las tres de la tarde en la Plaza César Tabares (Callao y Cazadores, a la altura de Arijón al 2700) para compartir una mateada y restaurar el mural de David Campos y Emanuel Medina, dos amigos acribillados a balazos en junio de 2017 por policías del Comando Radioeléctrico y de Acción Táctica tras una persecución vehicular.
El procedimiento policial que terminó con la ejecución de ambos jóvenes fue “arbitrario e indiscriminado” y “desobedeció los criterios de necesidad, racionalidad proporcionalidad exigidos para el uso policial de la fuerza y, en particular, para disparar sus armas de fuego reglamentarias”, explicaron desde la Multisectorial.
En ambas investigaciones judiciales, pese a las falencias de las pesquisas cuando los acusados son miembros de las Fuerzas de Seguridad, hay policías imputados que serán juzgados en juicios orales y públicos.
