La Central de Trabajadores Argentinos (CTA) se mantiene al borde de la ruptura. Las dos listas antagónicas, la del estatal Pablo Michelli y la del docente Hugo Yasky, siguen sin ponerse de acuerdo sobre la fecha en la que se celebrarán los comicios complementarios para definir quién comandará la organización sindical.
La semana pasada durante una reunión de la Comisión Ejecutiva Nacional, a la que no asistió el sector de Yasky pese a haber sido quien la convocó, Michelli y su grupo, vencedor en las elecciones de septiembre, convocaron a elecciones complementarias para el próximo 9 de diciembre. Sin embargo, la lista oficialista rechazó esa fecha.
Esta elección es una truchada, afirmó Yasky en diálogo con ámbito.com, al tiempo que reafirmó que esa convocatoria no tiene ninguna validez legal. El hasta ahora titular de la central embistió contra la postura de sus opositores y dijo que es una salida hacia delante, es abrir la puerta hacia la ruptura de la CTA. Michelli la semana pasada amenazó con que su sector abandone el armado sindical.
Yasky, en tanto, anticipó que se reunirá en las próximas horas con los representantes de la Lista 10, la cual encabeza, para definir los pasos a seguir. Lo que está claro es que no avalarán la convocatoria de Michelli para votar la semana que viene.
Los comicios de septiembre culminaron en victoria para Michelli. Sin embargo, Yasky impugnó el resultado luego de que en varios distritos se registraran irregularidades y la CTA terminó en un intríngulis que todavía sigue sin resolverse. Mientras tanto, el ministerio de Trabajo prorrogó los mandatos administrativos del sector oficialista para evitar la acefalía.
Para tratar de resolver el conflicto ambos sectores acordaron que se vuelva a votar en las provincias de Misiones, Mendoza y Tucumán, en la filial de los distritos bonaerenses de Esteban Echeverría y Ezeiza, en una urna de Mar del Plata y en otras 46 urnas del interior del país. Pero por ahora no hay nada definido.