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Paraná Metal: rechazo a la oferta y contrapropuesta

Obreros de la autopartista introdujeron modificaciones al plan de reactivación que presentó la empresa.

Trabajadores de Paraná Metal, reunidos en asamblea, rechazaron la oferta que hizo la empresa para reactivar la autopartista de Villa Constitución en el último encuentro realizado en el Ministerio de Trabajo de la Nación, que consistía en que 360 obreros regresen a sus puestos percibiendo la totalidad del salario y los 600 restantes se sometan a un sistema de suspensiones rotativas cobrando un subsidio estatal de 1.850 pesos más el aporte de las asignaciones familiares. La decisión implica que los trabajadores de la fábrica de autopartes continuarán con los cortes en la autopista Rosario-Buenos Aires y en la ruta 21 frente a la planta industrial. Al mismo tiempo, elaboraron una contrapropuesta para llevar a Buenos Aires la semana que viene en el marco de las negociaciones para destrabar el dilatado conflicto.

“Se han aprobado varias modificaciones a la propuesta que formuló la empresa. Entre ellas, elevar el monto del subsidio para los trabajadores que entren en el esquema de suspensiones rotativas, ya que un tercio de los empleados ingresaría a la planta cobrando el salario que corresponde, con adicionales incluidos”, comentó Juan Actis, secretario adjunto de la UOM Villa Constitución. “Nunca se habló de gerenciamiento mixto”, agregó el dirigente sindical.

Otro de los puntos que criticó la asamblea de los trabajadores de Paraná Metal, realizada ayer al mediodía en el auditorio de la UOM, fue la posibilidad de que sea la empresa en forma exclusiva quien haga un seguimiento del arranque de la producción. “Nosotros vamos a plantear que el método de trabajo sea monitoreado en los primeros 180 días también por los trabajadores y la UOM, además de la participación del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) y el Ministerio de Trabajo nacional”, sostuvo Actis en diálogo con este diario. 

El dirigente metalúrgico indicó que la oferta formulada por la firma Oil M&S, del empresario Cristóbal López, contempla que, en caso de reactivarse la planta y a medida que vaya aumentando la producción, se irían incorporando operarios suspendidos a la plantilla estable, además de promover la apertura de mercados internos y externos, como el de Ford Brasil, el máximo cliente que tenía la autopartista hasta hace unos meses. 

Con relación a los trabajadores que quedarían suspendidos, el dirigente de la UOM dijo que el Ministerio de Trabajo ofreció durante un mes una capacitación y la reubicación en otras empresas metalúrgicas de la zona. Además, se reabrirían los retiros voluntarios y se pagarían indemnizaciones adeudadas. “La semana que viene llevaremos la contraoferta a Buenos Aires. Estamos hablando con (el jefe de gabinete de Ministerio de Trabajo, Norberto) Ciaravino para coordinar el viaje”, contó Actis.

En tanto, los trabajadores mantienen los cortes de rutas con la misma modalidad de protesta de los últimos días: liberando el paso de vehículos cada media hora y entregando volantes entre los automovilistas que informan sobre el conflicto desatado hace un mes a partir de la negativa de la empresa de diseñar un plan de negocios en el marco de la convocatoria de acreedores. De todos modos, la patronal aceptó continuar al frente de la fábrica, aunque los términos de su propuesta de reactivación fueron rechazada ayer por los trabajadores.

José Díaz, obrero de Paraná Metal, sostuvo en declaraciones radiales que la propuesta que presentó la empresa “era bastante similar a la que hizo al comienzo del conflicto”. Según el integrante de la comisión interna de la fábrica, para solucionar el conflicto, “el Estado y el trabajador ponen todo y la empresa nada, ni un peso”. Para Díaz, la propuesta fue “lamentable” y criticó el rol del Ministerio de Trabajo que conduce Carlos Tomada en las negociaciones, puesto que “se pone del lado de la empresa”. 

En caso de que el conflicto de Paraná Metal no encuentre una solución, desde la Central de Trabajadores Argentinos anunciaron un paro nacional para el miércoles de la próxima semana en apoyo a los trabajadores que pelean por reactivar la fábrica de autopartes y en defensa de las más de 900 fuentes laborales en riesgo. Además, desde Amsafé, el sindicato que nuclea a los docentes públicos de Santa Fe, adhirieron a la medida y deslizaron la posibilidad de suspender las clases para el día del paro.

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