La demora por parte de la provincia en la difusión del cronograma de pagos a estatales y docentes de los haberes de diciembre calentó el clima y anticipó el debate por la política salarial para 2013. El ministro de Economía Ángel Sciara prometió encarar las negociaciones “con responsabilidad” y ratificó la voluntad del gobierno de mantener el poder adquisitivo de los salarios. Para la titular de Amsafé, Sonia Alesso, ese objetivo implica una recomposición no menor al 30 por ciento.
El año comenzó con demoras en el pago de los sueldos de diciembre. Eso activó la discusión entre los gremios docentes y el gobierno, que promete ir creciendo conforme se acerque el inicio del ciclo lectivo. Los maestros protestaron porque el Ejecutivo incumplió el acuerdo paritario que obliga a pagar los salarios dentro de los cinco primeros días hábiles de cada mes.
El ministro Sciara salió a dar explicaciones. Recordó que entre el 20 y 21 de diciembre del año pasado la provincia abonó el medio aguinaldo a todos los agentes estatales –unos 900 millones de pesos– y agregó que por los feriados de Navidad y Año Nuevo se demoró la recepción de fondos para hacer frente a las obligaciones del Estado.
La provincia también difirió el pago a los pasivos, que cobrarán entre el jueves 10 y el martes 15 de enero. Recién después cobrarán sus haberes los funcionarios políticos de los tres poderes.
Poder adquisitivo
Sciara se refirió ayer a las negociaciones paritarias con los gremios estatales y docentes. El funcionario anticipó que irán a dialogar con “la responsabilidad con la cual iniciamos el trabajo de paritarias apenas asumido el gobierno del doctor (Hermes) Binner en el año 2008”.
“Hemos trabajado muy bien con todos los gremios de los trabajadores públicos de la provincia y no veo razón para que no sigamos en el mismo sentido, con la consigna que hemos planteado históricamente: nosotros pretendemos que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo de su salario, es decir, que podamos tener ritmos de recomposición ajustados a la inflación esperada”, añadió.
El ministro confirmó que la caja provincial cerró con déficit el ejercicio 2012, aunque aún no tiene los números definitivos. “Se demora más o menos un mes el cierre del año”, explicó.
“A noviembre estábamos cerrando con superávit –continuó–. Eso denota el esfuerzo que hemos hecho para tratar de mantener una administración financiera con mucha responsabilidad”.
Según el funcionario, “eso lo hemos logrado gracias a que los gastos han crecido menos que los recursos. Hemos avanzado en la puesta al día con los contratistas de obra pública y hemos pagado sueldos y aguinaldos al día”.
Sin embargo, aclaró que “por el endeudamiento del mes de diciembre se va a plantear un déficit” que estimó que no superará la mitad del rojo de 2011, que había sido de 1.600 millones de pesos.
Amsafé canta 30
La secretaria general de Amsafé, Sonia Alesso, hizo público el malestar del gremio por el retraso del pago de salarios. “No estamos conformes porque el cronograma de enero incluye un día que sobrepasa el quinto día hábil, que es lo que dice la ley. Está informado el cronograma de pago de activos y no está todavía informado el cronograma de pago de jubilados”, sostuvo Alesso en declaraciones a LT8. Y reclamó “que se respete en el caso de los docentes el pago, como dice la ley, hasta el quinto día hábil”.
Consultada por las paritarias, la dirigente sindical respondió: “Nosotros planteamos siempre el tema de la canasta familiar y también la recuperación de la inflación. Hay una necesidad de que el salario docente sea digno. En términos de porcentajes, no hemos fijado todavía una posición formal; lo vamos a hacer a la vuelta del receso, pero sin ninguna duda la cifra no puede ser menor al 30 por ciento”.
Alesso criticó a la administración de Antonio Bonfatti por haberse negado a reabrir la paritaria salarial en la segunda mitad del año pasado, medida que calificó como una “cuestión unilateral del gobierno”. Y concluyó: “El 2012, en términos salariales, terminó mal y se siente mucho en los bolsillos de los docentes”.
Amsafé pretende que en paritarias se discutan otros temas además del salario: los concursos pendientes, los planes de vivienda y la reforma curricular, entre otros.