Así lo indicó esta mañana la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, en una rueda de prensa que ofreció en Casa de Gobierno.
La UTA, que lidera Roberto Fernández, y las juntas ejecutivas seccionales ratificaron esta semana «la vigencia y exigibilidad de la resolución conjunta, que determinó las escalas salariales para los trabajadores del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) y del interior tras el acuerdo con la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap)».
La medida de fuerza, de concretarse ante un posible incumplimiento del pago de esas escalas salariales, afectará mañana los servicios de corta y media distancia de todo el país.
«Las diferencias existentes entre el sector empresario y la autoridad de aplicación son completamente ajenas e independientes de los salarios de los trabajadores, quienes no pueden ni deben esperar disposiciones reglamentarias, convenios o rendiciones para percibir sus haberes. No pueden ser rehenes de la problemática del servicio», afirmó el comunicado de la UTA de esta semana.
La UTA exigió el cumplimiento de esa resolución de ambas carteras de Estado y del acuerdo alcanzado con la Fatap, y advirtió que de no producirse por parte de las empresas, desde el primer minuto del viernes comenzará una retención de tareas nacional.