Días antes de que Alberto Fernández anunciara el aislamiento social, preventivo y obligatorio, la gran mayoría de los clubes rosarinos (y santafesinos) habían decidido cerrar sus puertas. Es que con el anuncio de la suspensión de las clases, el domingo 15 de marzo, las autoridades de las instituciones deportivas entendieron que lo mejor era cerrar sus puertas para que la masa de socios no se agrupe en los clubes. Y cinco días después, llegó el presidente anunció la cuarentena obligatoria.
Desde ese momento, hace casi un mes, los clubes elaboran diferentes estrategias para poder sostenerse económicamente. Y teniendo en cuenta que ya venían golpeados en una economía desfavorable para la mayoría, el cerrar las puertas les significó pérdidas económicas a partir de la lógica merma en cobro de cuotas, y en consecuencia la imposibilidad real de sostener el pago de salarios.
Luego de varios reclamos, y con la premisa de que lo primero es la salud, los clubes fueron escuchados y en consecuencia, incluidos en diferentes medidas de ayuda económica a nivel nacional y provincial.
«Estamos en constante comunicación con los clubes», afirmó Claudia Giaccone
Los clubes, en su gran mayoría, se sostienen en base a la cuota de los socios y las socias. Por eso están realizando diferentes campañas para que los socios sigan pagando. Incluso el pasado lunes, Rosario Central lanzó una convocatoria por redes sociales y comenzó a ofrecer alternativas tecnológicas para aquellos que no están adheridos al débito automático, algo que ya había implementado Newell’s.
Relacionado a eso, después de charlas con diferentes entidades deportivas, el bloque de Diputados Provinciales del Frente Progresista elevó un pedido al Poder Ejecutivo provincial para que a su vez gestione ante el Poder Ejecutivo de la Nación, solicitando “que queden exceptuadas del cumplimiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio y de la prohibición de circular, las personas afectadas al cobro de las cuotas sociales de clubes, asociaciones o entidades deportivas sin ánimo de lucro”.
“Lo presentamos en la legislatura como una recomendación a Omar Perotti para que lo tenga en cuenta y también lo hicimos llegar a Claudia Giaccone, Secretaria de Deportes de Santa Fe”, contó a El Hincha la diputada provincial Lionella Cattalini.
Desde el comienzo de la cuarentena, los clubes, las asociaciones o entidades deportivas sin ánimo de lucro de todo el país, cuyo principal ingreso ordinario es el pago de la cuota social, se vieron imposibilitados de cobrar este ingreso por parte de aquellos que socios y socias que abonan en efectivo en sede o por medio de cobrador en su domicilio.
“Si bien muchos de los clubes tienen métodos de pago electrónico o mediante débito automático, hay una gran cantidad de socios y socias (porcentaje que difiere de acuerdo a cada club) que abonan su cuota en efectivo, en la sede del club o efectúan el pago a los cobradores a domicilio. Este universo de personas, entre otros factores, se corresponde con la alta tasa de empleo informal en Argentina, por la cual muchas personas no se encuentran bancarizadas ni poseen tarjetas de crédito o de débito, lo que implica, que aun disponiendo los clubes de métodos de pago alternativos, hay socios y socias que no podrán abonar mediantes estos métodos”, detalla el pedido elevado por el bloque socialista.
La actividad de los cobradores de cuotas, detallan, no difiere de lo dispuesto en el DNU 297/20 artículo 6° inciso 19 que habilita el “Reparto a domicilio de alimentos, medicamentos, productos de higiene, de limpieza y otros insumos de necesidad”. Y por eso, afirman: “Por lo tanto la posibilidad de que los asociados abonen sus cuotas por medio de cobrador a domicilio, cumpliendo las medidas sanitarias correspondientes, no causaría mayores perjuicios en la lucha contra la pandemia”.
Otro de los fundamentos expuestos en el pedido elevado a Omar Perotti, explica que el ingreso económico de los cobradores de clubes, en la mayoría de los clubes, “depende exclusivamente de la comisión del pago de cuotas sociales de los socios, por lo tanto estas personas en la actualidad se encuentran sin ningún tipo de sustento desde el inicio de las medidas de aislamiento”.
Así como cerraron sus puertas, los clubes abrieron una ventana. En coincidencia con el rol social que han cumplido históricamente, brindaron no sólo sus espacios sino también camas, colchones y almohadas para equipar los diferentes centros de aislamiento. Algunos se pusieron a disposición del Ministerio de Salud y ofrecieron sus instalaciones, en caso de que sean necesarias para utilizarlas como centros de aislamiento para pacientes leves o personas que no puedan realizar la cuarentena en sus hogares, y otros continuaron con su ayuda para llegar con comida a sectores más vulnerados.
“Los clubes en toda la provincia se están ofreciendo voluntariamente, eso también requiere gastos y aportes extras”, destacó la diputada que firma el pedido del Frente. Otro de los proyectos de ley que están elaborando desde el bloque también está dirigido a los clubes sociales y busca la posibilidad de exceptuar del pago de los impuestos provinciales mientras dure la pandemia.
