Alberto Perassi, padre de la mujer desaparecida en 2011 en la localidad de San Lorenzo, dijo este viernes durante la última audiencia del juicio oral seguido a cuatro civiles y cinco policías que se va «sin nada» del debate, porque a su hija «no la van a encontrar».
«El eje nuestro sigue siendo el mismo hasta hoy, el último día: queremos que aparezca el cuerpo, que aparezca Paula», sostuvo Perassi, siempre acompañado por su esposa Alicia, en el Centro de Justicia Penal de Rosario, donde desde hace tres semanas se realiza el juicio por aborto seguido de muerte que tuvo como víctima a su hija de 36 años.
Luego de las últimas palabras de una mujer policía imputada por encubrimiento, el tribunal presidido por la jueza Griselda Strologo, e integrado también por sus pares Álvaro Campos y Mariel Minetti, fijó el 2 de mayo próximo como fecha de lectura del veredicto.
«Nos vamos a ir de acá sin nada porque a Paula no la vamos a encontrar», dijo apenado Perassi, junto a su esposa Alicia, y un grupo de mujeres que los acompañó durante las 17 audiencias en las que se extendió el juicio oral.
En la última jornada, dio sus palabras finales la policía María José Galtelli, acusada de falsedad ideológica y encubrimiento y una de los cinco uniformados imputados en el debate oral.
La mujer se declaró inocente y dijo que fue «engañada» porque firmó un acta de procedimiento «antes de que se terminara de completar», mientras que su abogado pidió la absolución durante el alegado final.
Perassi (36) fue vista por última vez el 18 de septiembre de 2011 luego de salir de su casa de la localidad de San Lorenzo tras recibir un llamado telefónico.
La mujer vivía con su esposo y sus dos hijos y, según la investigación, mantenía una relación extramatrimonial con el empresario de esa misma ciudad Gabriel Strumia.
La teoría del caso de la Fiscalía, a cargo de Donato Trotta, es que la mujer quedó embarazada y fue obligada por su amante y la esposa de éste, Roxana Michl, a realizarse un aborto, práctica en la que habría muerto.
Por el presunto aborto está acusada Mirta Rusñisky y el cuarto civil imputado en el caso es un hombre llamado Antonio Díaz, asistente de Strumia.
El fiscal Trotta pidió prisión perpetua para los cuatro por aborto seguido de muerte, aunque el cuerpo de Paula nunca fue hallado.
«Se dieron el lujo de seguir con ese pacto de silencio del primer día, lo único que nos queda decir a nosotros es que se pudran en la cárcel», sostuvo el padre de la víctima tras la finalización de las audiencias.
Sobre ese punto, el fiscal dijo en su alegato final que «se han reproducido todos los indicios que consideramos probatorios» y «la falta del cuerpo demuestra que fue un plan ilegal».
Agregó que los jueces «no deberán valorar la falta del cuerpo como un descargo» sino que «debe ser valorado como una consecuencia de un plan criminal que fue parcialmente exitoso».
En el juicio también están imputados los policías Adolfo Puyol, Jorge Krenz, Aldo Gómez, Gabriel Godoy y la mencionada Galtelli, por encubrimiento y falsedad ideológica de instrumento público, entre otros delitos.
El fiscal solicitó 6 años de prisión para el primero y 16 para los restantes, mientras que sus abogados defensores solicitaron al tribunal la absolución de los acusados por entender que no existen pruebas suficientes para condenarlos.