“Fue un gol emotivo, aunque la definición fue muy mala. La pifié, pero entró y sirvió para empatarlo en un momento importante, justo antes del final del primer tiempo para llegar con otro ánimo al vestuario”. Pablo Pérez no tuvo inconvenientes en reconocer que no convirtió su mejor gol el sábado ante Independiente para igualar las cosas en el final de la primera parte. Después llegó la conquista de Víctor Aquino para el 2-1 definitivo y la renovación de esperanzas para las últimas dos fechas.
“La sensación es buena, volvimos a ganar después de perder dos partidos seguidos que dolieron demasiado. No jugamos bien, pero si ganás con actitud te quedás tranquilo. Por suerte, se abrió una puerta porque ganando y con algunos resultados podemos quedar arriba de nuevo”, dijo el volante ayer tras la práctica vespertina.
—El empate de Boca con Banfield apretó a todos arriba de nuevo…
—Nos volvimos a encaminar. Ese resultado nos ayudó desde la motivación, fue un plus de fuerza para encarar nuestro partido. No jugamos bien, pero desde la actitud entregamos todo. Dar vuelta un partido después de dos caídas seguidas habla a las claras de nuestra mentalidad. No cualquier equipo lo logra.
—¿Están confiados en que se puede dar?
—Tenemos que tener fe y estar confiados. Primero hay que ganar y después esperar por los demás resultados con mucha ansiedad. Ojalá se den como pasó este fin de semana y podamos llegar a la última fecha con chances.
—¿Es mejor jugar antes?
—Si ganamos vamos a presionar a todos, pero la verdad es que cuando salís a la cancha te olvidás de todo. Nosotros jugamos antes y tenemos que pensar en ese partido ante San Martín de San Juan. Después va a ser difícil mirar los demás partidos.
—¿Hoy cambiás rendimiento por resultado?
—Prefiero jugar mal y ganar, aunque es más fácil hacerlo si jugás bien. Nosotros proponemos presión y buen juego, y eso nos trajo hasta acá. Cuando las cosas no salen como el primer tiempo con Independiente hay que compensar con actitud.
—Enfrentan a un rival que llega muy exigido…
—Los dos estamos en una situación decisiva. Ellos quieren quedarse en primera y nosotros pelear el título. San Martín va a jugar de la misma manera que San Lorenzo. Si nosotros los presionamos y les robamos la pelota, se van a empezar a desesperar. Y si le convertimos mucho más. Si tenemos la chance de ponernos en ventaja, vamos a cuidar el resultado a muerte.
—Se logre o no el título, la sensación es que el balance personal y grupal son altamente positivos.
—En lo personal es bueno y en lo grupal ya no nos conformamos con sumar 30 puntos. Pero es cierto es que nadie imaginaba que podíamos hacer esta campaña. Si no podemos ganar el torneo, hay que valorar lo que hicimos con tanto esfuerzo.
