Un joven integrante de un grupo delictivo vinculado a Jonatan Camino fue condenado a prisión perpetua por dos de crímenes. La fiscalía lo acusó por el homicidio del carniocero Matías Andrés Fernández, ocurrido en octubre del 2020, y el de Nicolás Ríos un mes antes. El tribunal que lo sentenció estuvo integrado por los jueces Paola Aguirre, Hebe Marcogliese y Pablo Pinto.
En octubre del 2021, tras 89 allanamientos la Policía detuvo a varios integrantes de un grupo delictivo que fue investigado por un año y respondía a Jonatan Caminos, hermano de Pablo Caminos, quien comandaba una célula que responde a Ariel Máximo Cantero y mantuvo una disputa sangrienta con otros lugartenientes del jefe de Los Monos como Leandro “Pollo” Vinardi y Carlos Toro Escobar, que tienen influencia en la barra brava del club del Parque.
Según la pesquisa, Jonatan, desde la cárcel daba órdenes para lo comisión de distintos delitos, entre ellos extorsiones armadas, amenazas, homicidios, usurpaciones y organizar la venta de drogas. Entre las 16 personas imputadas por integrar esta banda, que tiene anclaje barrio Godoy y Villa Nueva, se encuentran Silvana “Jakie” Oviedo pareja de Pablo Camino y Maximiliano Brian Méndez, acusado en este juicio por los crímenes de Ríos y Fernández.
Para los investigadores Méndez, que está preso desde el 2020, era una de las personas de confianza del mandamás del grupo junto a otro joven identificado como Carita Martínez, encargados del brazo armado de la organización, explicaron.
Los crímenes
Méndez comenzó a ser enjuiciado a mediados de agosto por dos homicidios. El primer hecho ocurrió el 21 de septiembre del 2020 cuando desde un auto mataron al adolescente Nicolás Ezequiel Nikito Ríos. Ese día el chico de 17 años, caminaba con su novia rumbo a la casa de un amigo que tenía arresto domiciliario. Iban por 27 de Febrero y a la altura de Barra apareció un Renault 11. Cuando el vehículo estuvo cerca de la víctima le dispararon en la cabeza.
Tras el hecho se alertó al personal policial que ubicó el auto y se inició una persecución que terminó en Gaboto Al 6300 cuando el Renault 11 protagonizó un choque. Allí detuvieron a Maximiliano Brian Méndez y en del interior del coche se secuestró una caja con cartuchos calibre 38, contó una fuente policial.
Acusaron a la banda de Jonatan Camino por extorsión, balaceras y un homicidio en zona oeste
Nikito había sido atacado cinco días antes, el 17 de septiembre, en Garzón al 2600, donde vive Joel L., sindicado como el jefe de la gavilla rival a los Camino, pero se salvó de milagro. El día que mataron a Nikito, la casa de Joel también fue acribillada. Los pesquisas indicaron que en los cuatro días previos al crimen hubo cruces violentos entre las facciones.
El 22 de octubre del mismo año mataron en un almacén y carnicería ubicado en Bertolé al 7200 a Matías Adrián Fernández que atendía el lugar. El local estaba en el frente y en la parte trasera vivía la víctima con su familia, era padre de dos niños, uno de ellos de 1 año. Llegaron dos en moto, entraron al negocio y le robaron a Fernández. Según la fiscalía, para asegurar la impunidad del robo le dispararon a la víctima que murió en el Heca tras una operación. Concluyeron que Fernández los conocía y tras el robo pudo identificarlos.
Méndez fue ubicado en un control de rutina en Funes el 5 de noviembre del 2020, donde se negó a aportar su datos, y tras ser identificado, se constató que tenía un pedido de captura activo por el crimen de Fernández, el otro agresor nunca fue identificado.
Los fiscales Patricio Saldutti y Gisela Paolicelli de la Unidad de Homicidios Dolosos acusaron al joven por doble homicidio calificado, uno de ellos por uso de arma de fuego y el otro criminis causa, y por portación y pidieron prisión perpetua. Este martes, los jueces entendieron que el acusado fue el autor de ambos hechos y lo condenaron a la pena máxima que fija el Código Penal.