El empresario Francisco Sáenz Valiente pidió a la Justicia que realice un peritaje toxicológico tomando muestras de cabello de la modelo brasileña Emmily Rodríguez para probar que ella era consumidora de drogas desde antes de la noche en la que murió el 30 de marzo pasado.
El pedido fue hecho por los abogados Rafael Cúneo Libarona y Gustavo Orazi, defensores del empresario que está procesado por homicidio culposo y facilitación de un lugar para consumo de drogas en su departamento del barrio porteño de Retiro, donde la joven cayó al vacío desde el balcón.
El empresario sostiene que él no le proveyó la droga que consumió la modelo de acuerdo al peritaje que determinó la presencia de varios estupefacientes en su organismo, sino que ella ya tenía una adicción desde antes.
El pedido es para determinar posibles consumos de drogas de parte de Emmily desde antes de esa noche y con un plazo de los últimos dos años. “La prueba tiende a acreditar si la presunta víctima ya era consumidora de drogas y en qué cantidades, y cual fue su pasado vinculado con las drogas”, sostuvo el abogado Rafael Cúneo Libarona a NA.
Según los peritajes hechos esa noche en que Emmily estuvo con otras tres mujeres y el empresario, ella consumió marihuana, cocaína, éxtasis y ketamina, todo eso sumado a alcohol. La querella insiste en que Sáenz Valiente proveyó de esas drogas, en tanto que la defensa lo niega e insiste en que ella se autoabasteció y hasta tenía un historial de consumo.
La acusación contra el empresario, quien estuvo detenido algunas semanas, cambió de un homicidio a un supuesto abandono de persona y, finalmente, derivó en un delito culposo. Hoy está en libertad y a la espera que el caso pase a juicio oral y público.
Emmily Rodríguez murió al caer del balcón del sexto piso del departamento de Sáenz Valiente y éste asegura que no la empujó sino que ella se tiró por su propia voluntad luego de atravesar una suerte de brote psicótico por el consumo de drogas esa madrugada.
