En su alegato de clausura del proceso oral, el fiscal Federico Reynares Solari cambió la calificación original a Cantero, que llegó procesado como “organizador” de la banda, a la de comercio de drogas agravado por la participación de tres o más personas, indicaron los voceros.
Cantero está acusado de comercializar estupefacientes desde su lugar de encierro en 2016, a través de personas de su confianza que estaban en libertad.
La causa que lo tiene como acusado junto a otras 19 personas, entre ellas un policía Federal, un periodista deportivo partidario y un ex candidato a senador nacional por Santa Fe, se inició en 2016 como desprendimiento del caso conocido como Los Patrones.
En aquella causa se investigó el tráfico de 300 kilos de marihuana desde Corrientes y Chaco a Rosario y concluyó con una condena a 15 años de prisión a Guille, en diciembre de 2018.
En abril del mismo año había sido condenado a 22 años de cárcel en un juicio tramitado en la Justicia ordinaria como jefe de una asociación ilícita destinada a cometer múltiples delitos y por instigar un homicidio en presunta venganza por el crimen de su hermano, Claudio “Pájaro” Cantero.
El mes pasado, en tanto, un Tribunal Oral Federal de Rosario lo condenó a 10 años de reclusión al encontrarlo responsable de un secuestro extorsivo fallido –quienes lo ejecutaron se equivocaron de persona- también organizado desde la cárcel.
El fiscal Reynares Solari pidió además durante esta jornada 8 años y 6 meses de prisión para Leandro “Gordo” Vilches, uno de los lugartenientes de Cantero, por comercio de estupefacientes.
Vilches también aparece en las escuchas del caso dando directivas desde la cárcel para la venta de drogas al menudeo en un búnker de un barrio del norte de Rosario.
En su alegato, el fiscal solicitó al Tribunal Federal en lo Criminal 1 de Rosario, integrado por los jueces Otmar Paulucci, Ricardo Vázquez y Germán Sutter Sneider, la pena de 8 años para Edgardo Smolsky, un periodista deportivo partidario de Rosario Central que según la causa compraba cogollos de marihuana a proveedores de la provincia de Misiones.
Igual pena pidió para el oficial de la Policía Federal Cristian Negrete, que vivía en el mismo domicilio que Smolsky y sería quien intenta proveer impunidad a la banda.
El fiscal también solicitó 8 años de cárcel para el empresario de medios de comunicación de la localidad santafesina de Casilda y ex candidato a senador nacional, Juan Javier Granelli, por el mismo delito.
El juicio en el que el jefe de Los Monos podría volver a ser condenado se inició con una causa de 2016 a partir de la intervención al teléfono de Mario Sebastián Visconti, alias el Gringo, un ex barrabrava de Rosario Central asesinado de 9 tiros en junio de 2016, cuando la investigación estaba en desarrollo.
Con la intervención del celular de Visconti, los investigadores desentrañaron una red de venta de drogas al menudeo en distintos barrios de Rosario y el sur de Santa Fe que les permitió llevar 18 personas a juicio y el secuestro de 54,5 kilos de marihuana y 347 gramos de cocaína.
Parte de la marihuana que era vendida al menudeo en Rosario provenía de dos proveedores de la localidad de Puerto Esperanza, Misiones, y llegaba a Rosario a través de encomiendas enviadas por Correo Argentino.
En octubre de 2016 la Policía Federal secuestró 44 panes en la sede central del Correo en Rosario.
De acuerdo a la investigación, los pagos los realizaba Picu Smolsky a través de Western Union a Julio César Fernández y Orlando César Enriquez, para quienes el fiscal 4 y 7 años de prisión respectivamente, indicaron voceros del caso.