Militantes de la asociación civil Vox se concentraron ayer frente al Ministerio de Educación de la provincia para reclamar la urgente implementación de la educación sexual en las escuelas santafesinas. Desde la organización, que trabaja por los derechos de gays, lesbianas, travestis y transexuales, denunciaron que las guías enviadas por la Nación para el trabajo en las aulas están “guardadas en un galpón” y cuestionaron al gobierno provincial por “obedecer las órdenes de la jerarquía eclesiástica”. Desde el gobierno dijeron que los manuales se están repartiendo (ver recuadro).
“Esta es una campaña que recién comienza”, anunció Guillermo Lovagnini, referente de Vox. Y dijo que van a “emprender una ofensiva en toda la provincia” y también en el ámbito legislativo. Lovagnini criticó a la anterior administración de Hermes Binner por no avanzar en la implementación de la ley y, en particular, a la ex ministra de Educación Élida Rasino y a la actual ministra Letizia Mengarelli.
Reclamo
“Estamos hartos de que sigan posponiendo la aplicación de la ley de educación sexual. La provincia tiene una ley de 1992 que nunca se puso en marcha. En 2006 se promulgó la ley nacional de educación sexual integral. Desde la administración de Binner y Rasino que se viene posponiendo y con esta ministra (Mengarelli) pasa lo mismo. Hay una supuesta mesa de diálogo, pero no se avanza en nada concreto”, dijo el militante de Vox. La organización pide la plena vigencia de la ley de educación sexual integral con el argumento de que su aplicación ayudaría a disminuir la cantidad de embarazos no deseados, reducir las enfermedades de transmisión sexual y mejorar el conocimiento de la sexualidad para avanzar hacia una “sexualidad más libre, más placentera y sin tabúes”, según Lovagnini. “Hay una proliferación de embarazos adolescentes”, continuó el militante de Vox. Y puso como ejemplo a la ciudad de Rosario, donde las estadísticas indican que, a partir de 1995, el 28 por ciento de los partos registrados en las maternidades públicas son de menores de 19 años y el 1,2 por ciento de menores de 14 años.
Lovagnini se lamentó porque “son muchas generaciones de niños que pasan por la escuela y no tienen educación sexual”. Y agregó: “Entonces, van a aprender la misma porquería que nosotros aprendimos en el barrio, en la escuela”.
“Este gobierno se dice progresista pero no tiene nada de progresista”, criticó, y también fustigó. “Acá se siguen obedeciendo las órdenes de la jerarquía eclesiástica”. El referente de Vox exigió que la Iglesia “no se meta” en cuestiones que competen al conjunto de la sociedad civil, como la educación. “Esto es un Estado laico, no un Estado religioso”, añadió.
Campaña
Según informaron desde la organización, en algunas ciudades del centro-norte provincial –mencionaron Reconquista, Sunchales y Rafaela– se reparten, en escuelas públicas, otros materiales de estudio –en lugar de la guía elaborada por el Ministerio de Educación de la Nación– que promueven el no uso del preservativo y que sostienen que la homosexualidad es una enfermedad.
Lovagnini denunció que las guías enviadas por la Nación están “recontra guardadas en un galpón en la ciudad de Santa Fe” y se preguntó por qué las ONG no pueden participar en el diseño de la educación sexual en la provincia. “Tenemos un equipo de docentes preparados pero no se nos convoca”, se lamentó.
Los militantes de Vox también hicieron hincapié en la necesidad de avanzar en la capacitación docente. Sostuvieron que hay apenas nueve capacitadores para los casi 60 mil docentes de la provincia. “El modo de capacitación no es sostenible”, opinó Kai Allen, otra militante de la organización. “Son 40 horas presenciales u 80 horas virtuales. ¿Qué vamos a hacer con eso? Entre 2007 y 2011 había 13 capacitadores, ahora hay nueve. Entonces, ¿cómo vamos a salir adelante?”.
