El tribunal integrado por los jueces Eugenio Romanini, Carlos Gazza y Mariel Minetti tiene a cargo el juicio contra Brandon Bay y otras cuatro personas acusadas de haber integrado una asociación ilícita con el objetivo de hacerse del negocio de venta de droga en San Lorenzo mediante hechos violentos.
Los fiscales Matías Edery, Aquiles Balbis y Luis Schiappa Pietra acusaron a Brandon Bay, Nahir Estrella, Claudio Ríos, Fabián Sandoval y Juan Manuel Álvarez de constituir una de las organizaciones criminales más violentas, la cual aplicó los métodos utilizados en Rosario para intentar hacerse del mercado de drogas de San Lorenzo.
Según la acusación, Brandon Bay desde Coronda dirigía la banda e impartía las órdenes de los delitos que debían perpetrarse. Afuera, Nahir Estrella actuaba como organizadora, daba indicaciones a los ejecutores materiales de los atentados, se encargaba de la disposición de vehículos y armas, manejaba el dinero y pagaba a Sandoval, Ríos y Álvarez por la comisión de homicidios, balaceras y amenazas.
En el juicio se discutirán las circunstancias y autorías de los siguientes delitos: el homicidio de Rodrigo Gigena del 6 de agosto de 2019 en San Lorenzo, quien habría sido asesinado por error al haber sido confundido; el homicidio de Gerardo “Pecho” Pérez el 25 de mayo de 2020 en San Lorenzo; el homicidio de Brian Sánchez y la tentativa de homicidio de Carlos Rodrigo S. el 28 de mayo de 2020 en San Lorenzo; la tentativa de homicidio contra José Luis R. el 18 de mayo de 2020 y la posterior balacera contra su casa, en San Lorenzo; la tentativa de homicidio de Daiana A. el 18 de mayo de 2020 en Rosario; la balacera contra la casa de Gerardo “Pecho” Pérez el 28 de mayo de 2020 en San Lorenzo, después del ataque contra Sánchez y S.; la balacera contra la casa habitada por “Los porteños” P. el 1 de mayo de 2020 en San Lorenzo; la balacera contra un inmueble de San Lorenzo el 10 de octubre de 2019 por haberse negado sus ocupantes a vender droga para la asociación ilícita; la balacera contra un inmueble de San Lorenzo el 11 de febrero de 2020 para lograr que sus ocupantes abandonen el lugar.
Por su parte, los defensores Fosco y Villada alegaron que las pruebas presentadas por la fiscalía no son concluyentes y no permitirán alcanzar la certeza necesaria para lograr el dictado de una sentencia condenatoria, por lo que pidieron la absolución de los acusados.