La Unidad de Información Financiera (UIF) pidió al juez federal Sebastián Casanello que inhiba bienes y congele cuentas bancarias de una serie de sociedades que se le atribuyen al empresario Lázaro Báez, en el marco de la causa por presunto lavado de activos por la cual se encuentra detenido.
El pedido fue realizado este miércoles en los tribunales de Comodoro Py y alcanzó a 28 compañías, según indicaron fuentes judiciales y del organismo antilavado que depende del ministerio de Justicia.
Austral Construcciones, el club Boca Juniors de Río Gallegos y la constructora Kank & Costilla son algunas de las firmas mencionadas en la presentación realizada por el organismo que conducen Mariano Federici y María Eugenia Talerico.
Cuando dictó el procesamiento de los distintos involucrados en la causa, Casanello les aplicó embargos por 100 millones de pesos. La medida solicitada por la UIF no estaba en los planes del juzgado y podría perjudicar a los empleados de las distintas firmas.
El empresario Lázaro Báez se encuentra detenido desde el 5 de abril en el penal de Ezeiza, en el marco de una causa en la que se lo investiga por presunto lavado de activos provenientes de los distintos contratos de obra pública.
En esa causa también está detenido su contador Daniel Pérez Gadin y se encuentran procesados, entre otros, su hijo Martín Báez, el presidente de la financiera SGI Cesar Fernández y el titular de la empresa Top Air, Walter Zanzot.
El último movimiento trascendente en la causa se produjo la semana pasada cuando el hijo de Lázaro Báez se presentó en los tribunales federales de Comodoro Py para rechazar los cargos en su contra, tal como había hecho días antes su padre.
En la misma semana el juez Casanello ordenó la captura nacional e internacional del presunto titular de la firma «Helvetic Service Group», Marcelo Ramos, en el marco de la misma causa por lavado de activos.