En una declaración conjunta divulgada en Roma las tres agencias de la ONU especializadas en temas de alimentación con sede en la capital italiana instaron ayer a los líderes del G-20, reunidos en México, a “redoblar sus esfuerzos” en la lucha contra el hambre.
En la declaración, firmada por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (Fida) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), las tres agencias recuerdan que alrededor de 900 millones de mujeres y hombres están desnutridos y que la mayoría se encuentran en África y Asia.
“Ante esta dramática realidad, expresamos el deseo de que los líderes del G-20 redoblen sus esfuerzos para combatir el hambre”, sostiene el documento, dividido en diecisiete puntos.
“El crecimiento de la productividad, particularmente en la agricultura a pequeña escala, es un componente fundamental de sistemas alimentarios más resistentes y sostenibles”, aseguran las agencias especializadas de Naciones Unidas.
“Instamos a que la seguridad alimentaria y nutricional continúe ocupando un lugar destacado en el programa del G-20 en los próximos años”, subraya el texto.
No al despilfarro
En la declaración, las agencias de Naciones Unidas reconocen que es “importante reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos”, que actualmente ascienden a cerca de 1.300 millones de toneladas, o sea, “más de un tercio de los alimentos que producimos”.
Con ello “se reduce también la presión sobre los recursos naturales como la tierra, el agua y la diversidad biológica”, afirman las agencias de la ONU.