Un fiscal pidió hoy que se condene a los hermanos Alan y William Schlenker y a otros cuatro acusados a penas de entre 17 y 21 años de prisión al considerarlos coautores del homicidio simple con dolo eventual del hincha de River Plate Gonzalo Acro, cometido en 2007 en Villa Urquiza.
En su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 15, el fiscal del juicio, Gustavo Gerlero, solicitó 17 años de prisión para los hermanos Schlenker y Martín «Pluto» Lococo; 18 para Pablo «Cuca» Girón; 20 para Ariel «Colo» Luna y 21 para Rubén «Oveja» Pintos, para quien pidió la unificación con una condena anterior.
Si bien los Schlenker y Lococo llegaron a juicio acusados de haber instigado el crimen y los abogados querellantes ayer insistieron en ello, Gerlero afirmó que «es imposible establecer que la orden dada haya sido la de matar y en todo caso, quien dio la orden».
«Sabemos que existió un acuerdo de voluntades y en este caso todos y cada uno sabían el riesgo que podría causarse», consideró el fiscal, tras lo cual pidió que el homicidio sea analizado desde la óptica del dolo eventual.
Este tipo de homicidio es aquel en el que el autor tenía conocimiento o era consciente de que podía llegar a causar un daño y no hizo nada para interrumpir su acción.
«La idea era lastimar a Acro y alejarlo de la posibilidad de tomar la tribuna», sostuvo el fiscal ante los jueces Javier Anzoátegui, Hugo Decaría y Héctor Grieben y descartó que hubiera problemas personales con la víctima, sino que todo se enmarcaba en la interna por el poder dentro de «Los Borrachos del Tablón».
Según el representante del Ministerio Público, «cuando ocurrió el crimen había un gran estado de beligerancia entre las dos facciones y un juego macabro de golpes y contragolpes, que se aceleró en el momento del crimen».
Al igual que la querella, el fiscal consideró que el elemento de prueba más importante contra los imputados son los registros de llamados telefónicos que se hicieron antes, durante y después del crimen, los cuales detalló uno a uno.
Gerlero descartó todas las coartadas que presentaron los imputados al momento de declarar y remarcó que «todos sabían que se estaba preparando el ataque» y por eso mantuvieron distintas comunicaciones a través de Nextel.
Según el fiscal, Acro fue asesinado porque era el blanco más fácil para ubicar, ya que habían fracasado otros intentos de Schlenker y sus seguidores por buscar pelea con Adrián Rousseau, a quien el día anterior no habían encontrado en su casa, y con Héctor «Caverna» Godoy, actual líder de la barra.
El ataque contra Acro fue cometido cerca de las 23 del 7 de agosto de 2007 en la esquina de Bauness y Cullen, en Villa Urquiza, cuando el hincha se retiraba de un gimnasio junto a su amigo Osvaldo Matera.
Ambos fueron emboscados por varios jóvenes que bajaron de un auto y les dispararon. Matera, que sobrevivió al ataque, declaró que fue Luna quien baleó a su amigo.
En base a los argumentos expuestos, el fiscal pidió que a los seis imputados se los condene como coautores materiales de «homicidio simple con dolo eventual agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con lesiones leves», ésta última figura por el ataque a Matera.
En el caso de Luna, Gerlero le atribuyó, además, «portación ilegal de arma de uso civil»; a Girón se le agregó «resistencia a la autoridad», en tanto que pidió que a ambos se los declare reincidentes.
El juicio pasó a un cuarto intermedio hasta el 27 de junio, cuando alegarán los abogados de Alan Schlenker, Mariano Cúneo Libarona y Sebastián Rodríguez.