La propuesta llegó el lunes por la noche y tenía una iniciativa concreta: inundar las redes sociales el martes de 11 a 13 con el hastagh “#21DeAgosto”, para solicitarle a la legislatura porteña que declare esta fecha como el Día de las Futbolistas. Y también para visibilizar la desigualdad de género que existe en el deporte. El pedido se expandió en todo el país y replicó con fuerza a través de toda la web.
Actualmente se estipula que casi un millón de mujeres juegan al fútbol. Pero… ¿Por qué el 21 de agosto? Algún que otro distraído puede no saberlo, pero un día como hoy hace 47 años, el equipo nacional de fútbol femenino estaba disputando el Mundial en México y goleaba 4-1 nada menos que el seleccionado inglés en el estadio Azteca, con una descollante actuación de Elba Selva.
La delegación de futbolistas, desafiando las costumbres de la época, emprendió el viaje hacia el sueño mundialista sin ningún tipo de apoyo económico. Sin botines, sin médico y sin entrenador. Con una ropa deportiva que fue donada por una federación de fútbol femenino externa a la Fifa, y que luego del primer partido ya casi no servía.
Aquellas 17 mujeres tuvieron que bancarse el viaje vendiendo cosas en las calles mexicanas para hacerse de un peso que les permita continuar por el sueño de jugar a la pelota y defender la camiseta Argentina.
Así, la organización “Pioneras del Fútbol Femenino” rescató la historia de tantas mujeres protagonistas del deporte, que sin dudas es el más popular de nuestro país, y decidió impulsar la iniciativa virtual para que las mujeres futbolistas también tengan su día. Porque lo que no se cuenta o no se nombra, es como si en realidad no existiera.
