El presidente estadounidense, Barack Hussein Obama, anunció ayer la creación de un equipo liderado por su vicepresidente que para el mes próximo deberá presentar propuestas de cambios en las leyes de tenencia de armas para prevenir masacres como la de la semana pasada en Newtown.
En declaraciones en la Casa Blanca, el mandatario sostuvo que todos los estadounidenses tienen la “profunda obligación” de tratar de “prevenir estos eventos” y llamó al Congreso a que actúe y vote medidas que puedan encaminar los esfuerzos para realizar cambios respecto a la posesión de armas.
“Utilizaré todos los poderes de este cargo para ayudar en los esfuerzos dirigidos a prevenir más tragedias como ésta”, reiteró el mandatario en referencia a la masacre del viernes pasado en un colegio de Newtown, Connecticut, donde un joven mató a tiros a 20 niños y seis adultos antes de suicidarse. “Necesitamos trabajar para que el acceso a la salud mental sea por lo menos tan fácil como el acceso a un arma”, agregó en conferencia de prensa junto al vicepresidente Joe Biden, que encabezará el equipo de trabajo que deberá presentar iniciativas específicas en enero.
Ante el precipicio
Obama, afirmó ayer que ya hizo “concesiones” a los republicanos para lograr un acuerdo que evite el “precipicio fiscal” y que, entonces, espera cerrar un pacto antes de Navidad. En declaraciones a los medios, Obama subrayó que el “plan B” de los republicanos, que establece subas de impuestos pero sólo para las familias que ingresan más de un millón de dólares por año, no dice sobre subsidios de desempleo.
