Según estadísticas de la delegación local del Registro Nacional de Armas (Renar), en la primera etapa del Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego –esto es desde 2006 a fines de 2009– se recibieron cerca de 10.500 armas provenientes de las ciudades de Rosario (unas 5.200) y Santa Fe (5.300). En la segunda etapa, desde abril del año pasado hasta la fecha, se han recibido en Rosario un total aproximado de 1.800 armas. Desde el Ministerio de Seguridad de la provincia consideraron como “muy importantes” estas cifras y adelantaron a El Ciudadano que están trabajando en una nueva campaña masiva de concientización para evitar la tenencia de armas en manos de la población en general, ante los peligros que trae aparejada su manipulación.
El secretario de Seguridad provincial, Marcos Escajadillo, explicó que las campañas de entrega voluntaria de armas “son esenciales para prevenir muertes o accidentes”.
“Inclusive nosotros tenemos en el Renar a un subsecretario del Ministerio de Seguridad trabajando en lo que será una campaña de concientización en el área de Rosario y Santa Fe, que va a difundirse públicamente en poco tiempo”, anticipó el funcionario.
Por su parte, el titular de la delegación local del Renar, Raúl Bartolucci, explicó que la dependencia “tiene datos de venta de armas que mantienen una constante y seguramente tendrá –como todos los años– en la época de la temporada de caza un incremento, porque aparecen transferencias e incorporación de un nuevo material”.
Y marcó que “en la mayoría de los casos la gente tiene armas pero para uso deportivo”, en tanto que “son muy pocas las personas que tienen armas para la defensa” personal. De igual modo recordó que defender un bien jurídico “es un derecho constitucional”.
Con la noticia del asalto al conductor radial Baby Echecopar que terminó con un ladrón muerto y el propio Echecopar y su hijo internados con heridas de bala tras un intercambio de disparos en el domicilio de la figura mediática (ver página 16), Bartolucci recordó que “el Renar en lo institucional no alienta la tenencia de armas en manos de la población civil para la defensa de su bien jurídico”.
“Yo creo que la población le tiene que exigir al Estado que le brinde las condiciones de seguridad que corresponden”, aseguró.
“Acá para tener un arma hay que acreditar la condición de legítimo usuario de arma de fuego, que es una condición que otorga el Registro Nacional de Armas. En estos casos los requisitos son importantes, entre ellos no tener antecedentes penales desfavorables, un estado de salud psíquica y física apto para la tenencia de armas de fuego y acreditar un medio lícito de vida y tener una edad para el manejo del arma. Eso puede otorgar el derecho a tener un arma y a transportarla, no a portarla. Hay una diferencia entre transportar y portar importante, la portación de un arma es llevar un arma en la vía pública o en lugares de acceso público en condición de uso inmediato, es una potestad que otorga el Registro Nacional de Armas pero para quien excepcionalmente justifique su necesidad”, añadió.
“Si usted va al Registro Nacional de Armas y solicita su condición de legítimo usuario para tener un arma en su domicilio no se lo podemos negar si cumple con todos los requisitos. Ahora si me preguntan a mí en lo personal si quiero tener un arma en casa, le digo que me parece una barbaridad, que no sirve para nada. Hay que ser muy idóneo, hay que estar muy preparado y generalmente tiene consecuencias negativas”, subrayó el funcionario.
Más adelante, el titular del Renar informó que en la provincia de Santa Fe “hay aproximadamente 130 mil armas en manos de unos 45 mil legítimos usuarios”, prácticamente a razón de tres por cada uno. Pera hay aun quien tiene más: “Hay que recordar que las agencias de seguridad son legítimas usuarias y tienen muchísimas”, señaló Bartolucci.
“Ante un robo o extravío un legítimo usuario tiene que hacer la denuncia policial o judicial, como corresponde, y hacer la presentación en el Renar de manera tal que podamos incorporar el pedido de secuestro en el Banco Nacional Informatizado de Datos para, si se recupera, un juzgado pueda pedirnos a nosotros la información de la procedencia y nosotros brindarla”, comentó.
Por último, según datos del Ministerio de Seguridad del Gobierno de la provincia de Santa Fe, aproximadamente el 80 por ciento de las muertes por armas de fuego se producen a manos de personas conocidas, es decir, por conflictos interpersonales y accidentes, sin que medie otro delito, como por ejemplo, un robo.
“Sólo el 15 por ciento de las muertes están causadas en contexto de un hurto o asalto”, remarcó.
Otro de los riesgos sociales que conlleva la tenencia de armas en manos de la población civil es que si la misma es robada ingresa al mercado negro, reproduciendo y amplificando el espiral delictivo y de violencia.
Es que, obviamente, las armas legales son tan peligrosas como las ilegales. Y el mercado ilegal de armas se nutre de las que provienen del mercado legal. De hecho los expertos aseguran que las armas salen al mercado legal en un principio y luego pasan al mercado ilegal por robo, venta no registrada, herencia no declarada u otras causas.
“Entregar el arma para que sea destruida contribuirá a la construcción de una sociedad más pacífica y segura para todos y todas. Un arma menos en circulación es un arma menos que puede ser disparada”, se concluye desde la cartera.