El alcalde de la ciudad italiana de Milán, Giuseppe Sala, calificó hoy como «desconcertante» la decisión del gobernador de la región Lombardía, Attilio Fontana, que obliga a usar protección en «nariz y boca» a toda persona que quiera circular por las calles del norte del país, y que las fuerzas de seguridad nacionales se niegan a acatar.
«Desde hoy para salir a la calle debemos usar una mascarilla, o un foulard o una bufanda. Déjenme decir que es un poco desconcertante recibir esta disposición de la región Lombardía y que luego la Protección CIvil diga que no la usarán», dijo Sala en declaraciones formuladas a través de redes sociales.
La polémica se da luego de que Fontana dispusiera que desde este domingo todos los habitantes de Lombardía, la región más golpeada de Itaia por el coronavirus y de la que MIlán es la capital, están obligados a cubrirse para poder salir a la calle.
Sin embargo, el titular de la Protección Civil y vocero diario del gobierno nacional, Angelo Borrelli, planteó que ni él ni su equipo usan o usarán barbijo ya que la única medida que consideran es la del metro de distancia entre personas.
De todos modos, Sala planteó que acatará la disposición lombarda pero que lo importante será «controlar los precios y abastecer a las farmacias»; en un contexto en el que los barbijos se venden a entre uno y dos euros por unidad.
Lombardía registra el 56% de los 15.362 muertos hasta el momento en Italia a causa de la pandemia, así como el 40% de los más de 124.000 casos informados hasta ahora.