El mundo del streaming ha sido sacudido por el caso de Norme, un popular creador de contenido que decidió poner a prueba sus límites físicos y mentales al intentar romper el récord mundial de mayor tiempo sin dormir.
Conocido por sus videos de videojuegos y reacciones, Norme inició un directo en YouTube con el objetivo de superar las 288 horas de vigilia continua. Sin embargo, lo que comenzó como un desafío personal pronto se convirtió en una situación preocupante.
A medida que pasaban las horas, los seguidores de Norme fueron testigos de un preocupante deterioro en su estado físico y mental. El joven comenzó a experimentar alucinaciones, dificultades para concentrarse y cambios bruscos de humor.
Ante esta situación, muchos de sus seguidores expresaron su preocupación y denunciaron el directo por poner en riesgo la salud del streamer.
La reacción de las plataformas ante el desafío extremo de Norme
Ante la creciente presión de la comunidad y las denuncias de los usuarios, YouTube tomó la decisión de cerrar la cuenta de Norme, poniendo fin a su transmisión en vivo.
Sin embargo, el joven streamer no se detuvo y continuó su desafío en otras plataformas como Kick y Rumble, las cuales también terminaron cancelando su transmisión.
Un debate sobre la responsabilidad
El caso de Norme ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad de las plataformas de streaming en este tipo de desafíos extremos. ¿Hasta dónde deben llegar las plataformas para proteger la salud y el bienestar de sus creadores? ¿Qué medidas se pueden tomar para evitar que este tipo de situaciones se repitan?
Expertos en salud mental advierten sobre los peligros de privar al cuerpo de sueño y destacan la importancia de buscar ayuda profesional en caso de experimentar síntomas de privación del sueño.