Un oficial de la Policía Bonaerense quiso relajarse el fin de semana pero terminó siendo víctima de múltiples desengaños que lo llevaron hasta ser apartado de la fuerza. El uniformado pensó haber encontrado la cita ideal con una joven a través de la aplicación Tinder, en cambio cayó en la red de extorsionadores que no sólo le sacaron 320 mil pesos al hacerle creer que tenía una causa por mandarles fotos íntimas a una menor de edad, también lo embaucaron para que les entregara el arma reglamentaria. La denuncia fue radicada en la comisaría 6ª de Claypole, de Almirante Brown. Lo llamativo es que hace un mes una banda con similar ardid fue desbaratada por operar en el partido limítrofe de Lomas de Zamora.
Rodrigo M., tiene dos años de antigüedad en la fuerza y trabaja en Quilmes, el fin de semana se presentó en la comisaría de Claypole, donde vive, para denunciar que el viernes luego de mantener conversaciones e intercambiar fotos íntimas con una joven que conoció por Tinder, recibió una llamada de un número desconocido.
Del otro lado, un varón se identificó como un Policía federal y le dijo que lo estaban investigando por pedofilia, ya que le habían enviado fotos íntimas a una menor. Para reforzar su relato le reenvió las imágenes que había compartido y la propuesta fue que le pagara para hacerle desaparecer dicha causa.
El policía bonaerense no lo pensó dos veces y pagó 320 mil pesos enviando dinero a distintas billeteras virtuales entre Cuenta DNI y Mercado Pago.
Cuando pensó que todo había terminado, recibió otra orden para que entregara la pistola 9 milímetros marca Bersa de la fuerza y su celular. Los puso en una mochila y los extorsionadores pasaron en un auto color negro por su casa a buscarla, de acuerdo a la denuncia presentada por la víctima.
El fiscal Juan Manuel Baloira, de la UFI 3 descentralizada de Almirante Brown, está a cargo de la causa caratulada como coacción y ordenó medidas para identificar a los sospechosos como los registros que captaron las cámaras de vigilancia del barrio, al personal de la comisaría 6ª y de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI).
A su vez, tras dar aviso al área de la Auditoría General de Asuntos Internos ordenaron la desafectación inmediata del uniformado y solicitaron que entregara todo elemento provisto por la Policía Bonaerense.
Un banda con mismo ardid
A principios de septiembre y en Lomas de Zamora, el personal de la Dirección de Investigaciones de Delitos Económicos del área de Delitos Complejos de la Bonaerense detuvo a tres hombres y dos mujeres que están sindicados como integrantes de una banda de extorsionadores que operaba en ese partido.
La mecánica era la misma que la utilizada con el policía de Almirante Brown, contactaban a sus blancos a través de las aplicaciones Tinder, Badoo, Happn, Instagram y Facebook.
Las mujeres les proponían intercambiar números telefónicos y los enredaban hasta que entraban en confianza para que intercambiaran fotos íntimas.
En ese momento, entraban en acción los varones, quienes lo llamaban haciéndose pasar por un uniformado de la División de Trata de Personas de la PFA. Les aseguraban que tenían los celulares intervenidos por una causa vinculada a pedofilia y prostitución por lo que les exigía dinero a cambio de quedar desvinculados de la investigación.
La banda cayó el 4 de septiembre luego de que múltiples víctimas se animaran a denunciar y les secuestraron unos 13 teléfonos, anotaciones de interés, 108 chips de celulares, una notebook y cinco tarjetas bancarias.
