La presidenta Cristina Kirchner volvió a suspender a último momento y por consejo médico un viaje que tenía previsto realizar al exterior, en este caso a Asunción, para participar de los festejos del Bicentenario de la Independencia de Paraguay.
Según se informó en una nota oficial «debido a las condiciones climáticas reinantes en la ciudad de Asunción, República del Paraguay, se desaconsejó la realización del viaje que iba a efectuar en la fecha la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, a la mencionada ciudad».
El parte fue firmado por los doctores Marcelo Ballesteros y Daniel Fernández de la Unidad Médica Presidencial y difundido desde Asunción y sin más precisiones por el vocero presidencial y subsecretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro.
En el entorno de la jefa de Estado hubo máximo hermetismo durante toda la jornada y no se explicaron los motivos por los cuales fueron sus médicos los que pidieron suspender el viaje por razones «climáticas», a raíz de la lluvia en Asunción.
Fuentes encargadas de la organización de los traslados de la Presidenta señalaron que habían sido informados que Cristina Kirchner había amanecido con un fuerte «resfrío», aunque la información no fue confirmada oficialmente.
La suspensión del viaje se produce luego de que el pasado jueves Cristina Kirchner lanzara un duro mensaje al sindicalismo y pusiera en duda su candidatura a la reelección, tras advertir al borde del llanto sobre su «inmenso esfuerzo personal y hasta físico para seguir adelante».
Días atrás, también reconoció en un acto que se sentía «medio pum para abajo» y este viernes sólo mantuvo reuniones privadas en la residencia de Olivos y en Balcarce 50, hasta donde llegó sin maquillaje y sin su peinado característico, algo poco habitual en ella.
El último parte médico sobre la salud de Cristina Kirchner había sido difundido, sin embargo, a mediados de abril pasado, tras un nuevo cuadro de lipotimia que la obligó a suspender por 48 horas sus compromisos oficiales y también le impidió viajar a México.
La jefa de Estado tenía previsto partir a las 11:00 desde el sector militar del Aeroparque Metropolitano, pero finalmente la comitiva argentina emprendió vuelo al mediodía encabezada por el canciller Héctor Timerman.
«Ya teníamos todo el avión cargado y estábamos esperando que ella llegue, pero me llamó para decirme que el médico le había aconsejado que no viaje por las condiciones climáticas. Ella tenía ganas de viajar; ya teníamos todo listo para despegar, pero lamentablemente siempre hay que obedecer al médico», explicó Timerman a la prensa desde Asunción, adonde viajó acompañado por el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, senadores y diputados.
Sin Cristina, los representantes argentinos fueron recibidos en la estación aérea de Asunción por el embajador argentino en Paraguay, Rafael Romá, autoridades del gobierno paraguayo y funcionarios de la representación diplomática argentina, con quienes se trasladaron al centro de la ciudad para presenciar un desfile militar, que se demoró por las lluvias.
Luego, la comitiva argentina fue agasajada por el presidente Fernando Lugo con un almuerzo en Mburuvicha Róga, la residencia oficial, del que participaron, entre otros, sus pares de Bolivia, Evo Morales, y de Uruguay, José Mujica.
Además de la Presidenta, también estuvo ausente la mandataria brasilera, Dilma Rousseff, quien canceló su viaje por recomendación de sus médicos, dado que se encuentra en recuperación luego de padecer una neumonía.
Del desfile militar en Asunción participaron efectivos de las tres fuerzas armadas argentinas, de la Prefectura Naval y de la Gendarmería Nacional, además de una escuadrilla de aviones Pucará.
«Insistimos mucho en que estén la Gendarmería y la Prefectura, porque la Argentina y Paraguay son dos países que comparten una extensa frontera, la hidrovía Paraná-Paraguay es la vía de comunicación más fuerte, y todo este aporta, más allá de lo comercial, a la integración», indicó el embajador Romá.
