El presidente Mauricio Macri cumplió este viernes con uno de varios actos previstos en una ajustada agenda de campaña electoral. Con el eje puesto en mostrar acciones de gobierno en medio de indicadores económicos que se desploman, preguntó “por qué” los “anteriores gobiernos, de distintas banderías” prometieron obras y “no las cumplieron”. Y siguió con otro motivo central de la estrategia proselitista: “Dónde fue a parar el dinero de todos los argentinos”, inquirió el mandatario. Como cierre, pese a los datos negativos, rechazó cualquier modificación de rumbo: «Por más dudas que haya, es por acá, argentinos, es por acá”. Fue delante de un viaducto del ferrocarril Mitre en territorio porteño.
Macri inauguró el viaducto del Ferrocarril Mitre junto a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, sus dos compañeros inamovibles –lo superan ampliamente en imagen y en intención de voto en sus respectivos distritos– en la estrategia de campaña. Fuentes del oficialismo admitieron a medios porteños que, hasta las primarias nacionales, habrá un acto diario del presidente con sus los dos funcionarios de Cambiemos que mejor miden en las encuestas.
En el acto también estuvo el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich. Las autoridades enfatizaron que el viaducto beneficiará a más de 200.000 personas –entre usuarios del servicio y vecinos– que se movilizan a diario en la zona, además de eliminar ocho cruces con barreras en la ciudad de Buenos Aires.
“¿Qué hubiese sido si los gobiernos anteriores, de distintas banderías, se hubiesen comprometido a trabajar como un gran equipo, sin mezquindades, sin egos, con transparencia; qué Argentina tendríamos?, interpeló el mandatario con la mira puesta en la inauguración de obras como publicidad de su gestión. ¿Por qué no hicieron estas obras, por qué prometieron estas obras y no las cumplieron, cuáles fueron sus prioridades y adónde fue a parar el dinero de todos los argentinos?”, continuó la idea, aunque admitió enseguida que son “muchas preguntas y no tenemos respuestas”.
El discurso presidencial mantuvo el tono de la línea proselitista trazada por la alianza gobernante después de los últimos reveses económicos y la falta de resultados en la contención de la inflación, los índices de pobreza y el mantenimiento de fuentes laborales: “Lo importante es que siento que aprendimos, que entendimos que dependemos de nosotros, con la verdad sobre la mesa; nosotros venimos a encarnar un cambio que arrancó mucho antes de que gobernásemos la ciudad, y ahora lo estamos llevando a todo el país, que tiene que ver con estos cimientos que estamos construyendo, y que no se hace de un día para otro; es un desafío, pero es el premio hacia un futuro mejor para todos”, prometió para adelante.
Macri insistió en que “éste es el rumbo que nos lleva a futuro y cada obra que terminamos nos acerca un paso más a esa Argentina que queremos”.
Eludiendo los indicadores económicos adversos en su discurso, el jefe del Estado cerró con una de las consignas que mantiene la coalición oficialista: “Claramente demuestra que sí se puede, demuestra que si hay honestidad, compromiso y trabajo, se puede. Entonces, por más dudas que haya, hoy les vuelvo a decir es que es por acá, argentinos, es por acá”.