Esta semana, la Mesa Promotora Quinta de Funes anunció que por primera vez la Universidad Nacional de Rosario convoca a estudiantes universitarios a desarrollar prácticas académicas en el Sitio de Memoria de la localidad vecina a Rosario. Las inscripciones están abiertas hasta el 10 de agosto.
A través de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales y en el marco del Proyecto Académico Extracurricular (PAE), se abre esta oportunidad para realizar prácticas de formación para estudiantes de la carrera de Comunicación Social y del Profesorado en Comunicación Educativa.
La expropiación de la Quinta de Funes fue hace casi 8 años y «tuvo y tiene como objetivo convertir el lugar en un espacio de memoria y difusión de los derechos humanos de ayer y de hoy, preservando los valores testimoniales históricos y culturales», detallaron los impulsores de la restauración del espacio en Funes.
Este proyecto propone la participación de estudiantes «para profundizar el conocimiento de los ciudadanos de la región sobre la existencia de este espacio de memoria y construir un relato que cuente su historia con materiales pensados para distintos públicos».
Se pretende cubrir tres plazas que estarán a cargo del acompañamiento Alejandro Geliberti y Hugo Berti. En este link se pueden ver los detalles de la convocatoria.
Desde la Mesa Promotora confirmaron que «se está a la espera de las necesarias y anunciadas obras de refacción y preservación del lugar». Por esto, informaron, continúan «la convocatoria a la ciudadanía a acercar propuestas y proyectos los sábados a la mañana o contactarse a través de su Instagram Quinta de Funes Sitio de Memoria«.
Qué fue la Quinta de Funes
Entre septiembre de 1977 y enero de 1978 funcionó en este lugar, ubicado en la intersección de la Ruta 9 y San José en la localidad de Funes, un lugar reconocido en causas judiciales como Centro Clandestino de Detención. La Quinta de Funes integró el circuito represivo de la subzona 21, dependiente del Comando del II Cuerpo de Ejército, con asiento en Rosario y que abarcó las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chacho y Formosa.
Desde esta quinta y por orden de los generales Leopoldo Galtieri y Luciano Jauregui se ideó el plan de inteligencia conocido como «Operación México», cuyo objetivo fue secuestrar a la cúpula de Montoneros que se encontraba en aquel país.
Tras el fracaso del operativo la casa fue desmantelada y los secuestrados trasladados a la Escuela Magnasco y posteriormente a la quinta conocida como «La Intermedia». En la causa conocida como «Guerrieri» quedó probado que la mayoría de ellos fueron asesinados y sus cuerpos desaparecidos.
El mismo grupo de tareas, integrado por miembros del destacamento de Inteligencia 121, operó también en los centros de reclusión ilegal «La Calamita» y Fábrica de Armas «Domingo Matheu».
La Quinta de Funes fue señalizada como Sitio de Memoria en marzo de 2016. Es uno de los 800 lugares consignados como tal en el país, en Santa Fe hay, hasta ahora, unos veinte lugares reconocidos así: espacios donde se torturaba y asesinaba personas por su identidad política o lugares desde donde se planificaba el exterminio.
El predio que ocupa tres manzanas y era custodiado por personal de Gendarmería, vestidos de civil. Además, tal como puntualizaron organismos de derechos humanos allí funcionaba «una imprenta clandestina, desde la cual el Ejército falsificaba folletos de militantes de Montoneros».
