Una parte de las aguas del Gran Canal de Venecia, en Italia, se tiñeron de verde fosforescente y la policía investiga las causas, en medio de
especulaciones de que se trata de una acción de activistas ecologistas, según se informó este domingo oficialmente.
El cambio en el color del agua fue reportado por los residentes, informó en Twitter el presidente de la región del Véneto, Luca Zaia. «El prefecto convocó una reunión urgente con la policía para investigar el origen», agregó.
«Tras las primeras investigaciones, llevadas a cabo por los bomberos, junto con la policía local de Venecia y la agencia regional para la prevención y protección del medio ambiente de la región del Véneto (ARPAV), la sustancia parece ser un trazador, es decir, un líquido que se inyecta en aquellas circunstancias en las que se produce una fuga de agua con el fin de conocer el camino seguido» y que también se utiliza en espeleología (ciencia que estudia entre otras cosas, la formación de las cavernas y las cavidades subterráneas naturales), informó un comunicado policial.
Por eso, se baraja la posibilidad de que el fenómeno sea parte de una protesta de activistas medioambientales, informó el diario local La Nuova Venezia.
Esta no es la primera vez que las aguas del Gran Canal se tiñen de verde, por que en 1968 el artista argentino Nicolás García Uriburu entintó las aguas de esta vía durante la 34ª Bienal de Venecia para crear conciencia sobre la ecología.