En la ceremonia de premiación de la Copa América del pasado sábado pasó algo fuera de lo común. Mientras se entregaban los galardones individuales, un directivo tomó uno de ellos sin que fuera entregado y se lo llevó sin levantar demasiada polvareda: era el del mejor jugador del torneo.
Desde que se impuso este premio, en 1987 siempre se entregó. Sin embargo, en esta ocasión se omitió sin que la organización diera una explicación. Se manejan dos posibles teorías, aunque ambas tienen algo en común: el elegido era Lionel Messi.
La primera teoría asegura que el rosarino rechazó recibir el premio luego que Argentina perdiera la final, ya que no estaba de acuerdo con recibir una distinción individual al mejor jugador del certamen cuando su Selección acababa de perder la final.
La otra es que ocurrió un choque de intereses entre el sponsor principal de la Copa América y el del jugador. Al parecer, Nike pidió que se cambiara la elección de Messi, quien es vestido por Adidas, algo a lo que la organización no accedió. Como no llegaron a un acuerdo, habrían decidido suprimir el galardón.
Los dos caminos apuntan a que Messi fue elegido el mejor jugador de la competencia. Habrá que ver si la organización aclara la situación o deja vacante el galardón, algo que a priori parece desprolijo.
