En la primera reunión, celebrada el jueves 1 de septiembre, el ministro de Trabajo, Juan Manuel Pusineri, había adelantado la intención del Gobierno de llegar al segundo encuentro con una oferta que complete la política salarial del año, que se inició en marzo con un 46% de aumento.
La reunión de hoy, prevista para las 11, fue suspendida a media mañana luego de conversaciones con los secretarios generales de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Jorge Hoffmann, y de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN); Jorge Molina.
En las negociaciones se están barajando diferentes posibilidades, desde un acuerdo hasta marzo, cuando se comenzarán a discutir los salarios de 2023, y un entendimiento corto hasta diciembre, que es bien visto por el Gobierno.
La relación entre la administración provincial y los sindicatos que agrupan a los trabajadores del Estado, docentes y del sector salud comenzó a tensarse en mayo, cuando se iniciaron las protestas en reclamo del adelantamiento de la revisión salarial.
Por esa razón se llevaron adelante una serie de paros que no pudieron torcerle la mano al Gobierno, que logró el reinicio de la instancia paritaria en el mes previsto.
Las reuniones con los docentes y los agentes sanitarios se desarrollan en paralelo, pese a que es habitual que los porcentajes de incremento sean los mismos.
La expectativa ahora se centra en la reunión prevista para el lunes con los representantes de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) y del Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) ante el nuevo escenario que plantea la postergación del encuentro de hoy con los estatales.
Además del porcentaje de aumento otorgado por el Gobierno en marzo, los equipos técnicos tienen en cuenta la evolución del Índice de Precios (IPC), que en la provincia acumuló un 45,4% de enero a julio, y un 68,3% en el recuento de los últimos 12 meses.
