Un policía santafesino que en 2015 fue exonerado por estafar a colegas con el cobro de “traslados” dentro de las Fuerzas volvió a ruedo. Con la misma modalidad de antaño –intercambiar dinero por falsas gestiones– en los últimos meses se hizo de una suma cercana a los 400 mil pesos sin escatimar recursos: la Fiscalía lo acusó de hacerse pasar por abogado de la Ansés, por jefe policial y hasta por juez de Cámara a fin de concretar sus engaños. Esta vez, las víctimas no fueron policías.
Juan Marcelo Mendieta, de 38 años y oriundo de Esperanza, se hizo fama de buen tipo. Cada vez que algún amigo o conocido necesitaba algo, él estaba dispuesto a “darle una mano” y “tocar algún contacto” con ayuda de algunos billetes de por medio. Como todo ardid, la mentira se cae cuando el objetivo no se cumple. Mendieta fue denunciado y acusado de tres hechos cometidos entre septiembre y noviembre pasado.
Según la imputación realizada el último jueves de noviembre por las fiscales de la ciudad de Santa Fe, María Laura Urquiza y Mariela Jiménez, a una de las víctimas le dijo que era funcionario de la Ansés y le prometió una “reparación histórica” que entrega ese organismo nacional. Entre depósitos bancarios y dinero en efectivo se hizo de 242 mil pesos durante el mes de septiembre.
Un octubre, otras dos víctimas resultaron estafadas por un monto de 100 pesos por medio de depósitos en la mutual Centenario de Humboldt y efectivo. El dinero fue a cambio de utilizar sus “contactos en los Tribunales de Santa Fe” para beneficiar a las víctimas que allí tramitaban causas judiciales. Para ello, el policía exonerado se hizo pasar por funcionario de la Cámara de Apelaciones de la capital provincial.
La saga de estafas, según la Fiscalía, continuó en noviembre cuando defraudó a una mujer que quería que su hijo ingresara a la Escuela de Policías. Luego de asegurar que era un alto jefe policial, Mendieta dijo que disponía de cinco vacantes y le ofreció uno de esos lugares por la suma de 35 mil pesos. “La víctima le entregó el dinero en efectivo a través de tres depósitos que hizo en la Mutual Alma Juniors de Esperanza”, señalaron las fiscales.
Preguntale a Mendieta
“Inventa el cuento según lo que la gente está necesitando”, dijeron las fiscales en modo de síntesis durante la audiencia imputativa.
“La modalidad delictiva implementada por el imputado fue la misma en los tres hechos ilícitos que atribuimos hasta este momento”, sostuvieron para agregar que «simulaba ser una persona que no era, y a través de distintos artilugios solicitaba dinero a las víctimas para lograr beneficios administrativos en distintas instituciones nacionales y provinciales”.
Mendienta fue detenido el martes 26 de noviembre en una vivienda ubicada en Saavedra al 1400 de la ciudad de Esperanza en un allanamiento llevado a cabo por personal del Departamento Operativo de Investigaciones (Región I) de la Policía de Investigaciones (PDI). Las fiscales detallaron que en el procedimiento se secuestró dinero en efectivo, un automóvil y diversos elementos de interés para la investigación.
Dos días más tarde el juez José Luis García Troiano aceptó la imputación por el delito de “estafas reiteradas en concurso real” y se solicitó la prisión preventiva. Pero Mendieta recibió el beneficio de “libertad con alternativas”, con la condición del pago de una fianza de 150.000 pesos, según lo dispuesto por el juez Gustavo Urdiales.
Viejas mañas
En 2013, Mendieta había sido pasado a disponibilidad por una serie de irregularidades que terminaron en una causa penal dos años después. Pese a que acumuló varias denuncias por estafa con similar mecánica, en 2015 alcanzó un acuerdo en la Justicia provincial y fue beneficiado con una “suspensión del juicio a prueba”, que no le deja antecedentes penales.
Por entonces, siendo policía, decía tener un alto cargo dentro de la Policía provincial y le ofrecía a los agentes traslados y otro tipo de gestiones a cambio de dinero.
