Científicos de la Facultad de Bioquímica y Farmacia de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), quienes descubrieron la fórmula química para crear reactivos que detecten inmediatamente las bacterias que originan «la diarrea infantil», obtuvieron un premio de 4,8 millones de pesos en el concurso de innovación científica impulsado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación.
«Se trata de una investigación que veníamos desarrollando un equipo de científicos desde hace 16 años y consiste en un KIT-caja de reactivos- que puede detectar cinco bacterias simultáneamente en pacientes pediátricos con síntomas de diarrea», explicó en diálogo con Télam la directora del proyecto y catedrática de la Facultad de Bioquímica y Farmacia, Claudia Balagué.
Al destacar que la caja de reactivos creada, «puede ser utilizada por cualquier bioquímico y en cualquier laboratorio o centro asistencial», Balagué resaltó la importancia de la investigación, que derivó en la obtención de la fórmula química reactiva.
«Actualmente los análisis de cultivos tradicionales para detectar la bacteria que afecta a un paciente con síntomas de diarrea, tardan hasta cuatro días y no siempre se detecta la bacteria que efectivamente está actuando con la consiguiente demora en el diagnóstico y el tratamiento», explicó la científica.
Con el «KIT de reactivos logrado, un total de cinco bacterias pueden detectarse en cuatro horas y de esa manera se gana tiempo para indicar el tratamiento», explicó.
Al considerar que la «rapidez» en la detección fue el «mayor logro» alcanzado por la investigación y al resaltar «que el mundo científico de la bioquímica y bacteorología aún no había logrado dar con este tipo de reactivos», alentó expectativas sobre que el producto fabricado en Rosario pueda representar un «verdadero avance en la reducción de la morbimortalidad infantil» en diagnósticos de diarrea.
«Se trata de prevenir complicaciones severas, como el Síndrome Urémico Hemolítico que, como sabemos, puede terminar en diálisis, en transplantes renales y hasta en la muerte», apuntó.
Sobre el origen de la postulación que mereció el reconocimiento de un jurado integrado por científicos extranjeros y que otorgó un premio de 4,8 millones de pesos, reveló «que el proyecto fue desarrollado con el apoyo de un consorcio público-privado».
«El monto recibido de parte del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, nos permitirá financiar en un ciento por ciento el desarrollo del producto en el término de los próximos tres años que es cuando creemos podrá ser comercializado para estar al alcance de todos», adelantó.