Por: Ana Laura Piccolo
Un hombre que fue baleado por la Policía durante un tiroteo el pasado 30 de marzo, y quien está acusado de robar una cartera, se recupera de una operación en el calabozo de la comisaría 12ª, adonde ayer los internos realizaron un motín por las condiciones de hacinamiento, ya que en el penal había 26 presos en un lugar para 12 (ver nota subordinada).
Cristian M., de 32 años, está detenido por su presunta participación en el robo de una cartera y fue trasladado a la seccional 12ª minutos después de recibir el alta médica del Heca, adonde fue sometido a una operación, en la que le extrajeron tres plomos que le dispararon. Debido a su delicado estado de salud y a las malas condiciones de higiene que existen en el penal, su abogado defensor presentó ayer un escrito en los Tribunales solicitando la “detención domiciliaria” de su cliente y una “inspección judicial al lugar de detención”, adonde hay 26 presos “hacinados”, según denunció.
Cristian M. cayó herido el pasado 30 de marzo durante una persecución policial que iniciaron efectivos de Patrulla Urbana a la altura de Felipe Moré y Urquiza, frente a una villa de emergencias que bordea las vías del ferrocarril, en la zona noroeste de la ciudad. Según los uniformados, el detenido viajaba como acompañante en una moto que resultó sospechosa porque uno de los pasajeros llevaba “una cartera de mujer” y al no acatar la voz de alto se inició una persecución con tiroteo, en donde Cristian recibió tres balazos policiales: uno en cada pierna y otro en el abdomen. La Policía dijo que el hombre –imputado de “robo calificado, portación de arma de uso civil y resistencia a la autoridad”– tenía en su poder un revólver 22 largo, aunque esa versión fue desmentida por el detenido en su primera declaración indagatoria que se le tomó desde el hospital.
Tantos los familiares de Cristian como el letrado que lo patrocina aseguran que las condiciones del penal adonde está detenido son “deplorables” y temen que su estado de salud empeore en las próximas horas, dado que acaba de salir de una cirugía. En ese sentido, el abogado Luis Tomasevich presentó un escrito en el juzgado de Instrucción de la 12ª Nominación solicitando la “urgente detención domiciliaria” y una inspección al lugar en el que está alojado, entre otras medidas. Entre los argumentos, el letrado detalla que el lugar de alojamiento no cuenta con “las más mínimas condiciones de higiene y tratamiento indispensable para la dolencia” que padece Cristian, que en su lugar de encierro hay otros “26 detenidos hacinados, muchos con enfermedades infectocontagiosas” y que allí es “imposible su curación y corre serio peligro de contraer otras enfermedades”.
El escrito, en el que también ofrece la historia clínica de su defendido y pide una inspección judicial, fue presentado en el juzgado de Instrucción 12ª aunque ayer se conoció que la causa fue trasladada a la 11ª, a cargo del juez Hernán Postma, por una acumulación subjetiva.
