El primer imputado por trata de personas con explotación a través de medios digitales y abuso sexual reiterado del país, fue condenado a 25 años de prisión por haber sometido entre 2017 y 2020 a tres mujeres, una de las cuales se suicidó antes de la detención del agresor.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal 4 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires condenó a 25 años de prisión a Fredy Junior Arturo Zea Ricardo por haber abusado y explotado sexualmente a tres mujeres entre 2017 a 2020, a quienes engañó con falsas promesas laborales para obligarlas a prostituirse.
A partir de la pandemia, también las obligó a tener sexo virtual delante de webcams en diferentes departamentos del barrio porteño de Retiro. Es la primera condena por trata con explotación por medios digitales.
Desde el Ministerio Público Fiscal detallaron que la pena de 25 años fijada por la jueza María Gabriela López Iñiguez y Guillermo Costabel y Luciano Gorini, es tan solo dos años menor a los que habían pedido los fiscales.
Una de las medidas que ordenó el Tribunal es la extracción de testimonios para investigar la posible participación de otras personas en los hechos.
Zea Ricardo captó a la primera víctima, a través de un anuncio en un diario en el cual «solicitaban modelos sin experiencia para una supuesta campaña publicitaria». Fue así como, desde mediados de 2017 y hasta el 4 de septiembre de 2020, «el hombre la acogió con la finalidad de explotarla sexualmente trasladándola hacia distintos departamentos de Buenos Aires».
Durante años fue forzada a mantener relaciones sexuales con clientes y recién en septiembre de 2020 esta víctima logró escapar.
Le bastó un aviso
El condenado joven utilizó como atractivo para las jóvenes que luego prostituía. Usó un anuncio en un diario en el cual «solicitaba modelos sin experiencia para campaña publicitaria». Las ansias de triunfar en esa profesión le llevó a su departamento a la primera víctima. En 2017 la escogió y la mantuvo cautiva en su mundo de placer por dinero hasta el 4 de septiembre de 2020. «El hombre la explotó sexualmente por distintos departamentos. En septiembre de 2020 esta víctima logró escapar.
Su primera víctima se suicidó luego de escapar
En cuanto a la tercera víctima, conoció al imputado en un boliche de zona sur del conurbano bonaerense que ambos frecuentaban. «Luego de conversar sobre las aspiraciones laborales que tenía la víctima, Zea Ricardo le prometió brindarle trabajo como promotora».
La investigación se inició en febrero de 2018, fecha en que la segunda víctima logró escapar del departamento donde se encontraba cautiva. En septiembre de 2020, se produjo la huida de otra de las damnificadas, por lo que se inició una nueva pesquisa, la cual se sumó a la primera.
Después de la detención del imputado, la tercera víctima lo reconoció, se acercó a denunciarlo.