El comisario retirado detenido el lunes pasado en el marco de una investigación sobre pornografía infantil fue imputado este miércoles y quedó detenido con prisión preventiva por 60 días. Según la acusación, el uniformado jubilado, de 64 años, enviaba fotos a desconocidos de víctimas menores de 13 años, “tocadas” por adultos, a través de Whatsapp pero con identidades de otras personas. También le imputaron el delito de amenazas a uno de esos contactos, además de la tenencia ilegal de una pistola 9 milímetros con la numeración limada que tenía en su domicilio al momento de ser allanado.
La acusación recayó sobre el comisario retirado Carlos Daniel Casella, quien el lunes pasado fue detenido durante un allanamiento en su domicilio de pasaje Casaccia al 5500 de la zona sudoeste de Rosario por efectivos de la comisaría 29ª y de la División Judiciales.
La causa es investigada por la fiscal de la Unidad de Delitos contra la integridad sexual Noelia Riccardi, quien le imputó haber mandado mensajes telefónicos con contenido de pornografía infantil al menos en cinco oportunidades entre el 16 de agosto y el 10 de septiembre de este año, y en una de esas fechas también de haber propinado amenazas por Whatsapp a uno de esos contactos.
Según la acusación, los destinatarios de esos mensajes, domiciliados en las localidades santafesinas de Carlos Pellegrini, San Carlos Centro, Gálvez y Rosario, eran personas a las que no conocía. En ese sentido, aclaró que al momento de identificarse utilizaba el nombre de su ex pareja y el de un hombre, que sospechan que es el actual novio de esa mujer, y decía pertenecer a la ciudad de Gálvez-
Durante la audiencia, la fiscal detalló que los mensajes enviados contenían imágenes de las partes íntimas de menores de 13 años en las que podían verse “tocamientos por parte de una persona mayor”. También, en algunas imágenes se ve a la ex pareja del comisario, quien se encuentra imputada y detenida bajo sospecha de un presunto abuso sexual en la ciudad de Gálvez. Aunque se trata de otra causa penal, la misma se habría iniciado a partir de las mismas imágenes por la que fue detenido el comisario Casella.
Por el envío de imágenes registrado los días 25 de agosto y 7, 8, y 10 de septiembre, se le imputó al policía el delito de distribución de pornografía infantil agravada en calidad de autor, y como hecho consumado en cinco oportunidades.
Además quedó acusado de amenazas simples por haberlas propinado también por mensaje de Whatsapp a un contacto de Rosario el 16 de agosto.
Por último se le endilgó el delito de tenencia ilegítima de arma de fuego de guerra y encubrimiento agravado en concurso real, por la pistola calibre 9 milímetros marca Taurus con numeración limada secuestrada en su casa con 16 cartuchos y 37 municiones del mismo calibre.
El juez penal de primera instancia Carlos Leiva dictó prisión preventiva por 60 días.